El PP o el arte de decir una cosa y hacer justo la contraria. Incluso al mismo tiempo. LVDS Jerez adelantó ayer que el Juzgado ha anulado dos sanciones del Ayuntamiento contra la hasta hace unos meses concesionaria del transporte urbano, Urbanos Amarillos, reduciendo el importe de la multa, que se remonta a cuando se produjo el secuestro de la concesión en 2012, de algo más de 4 a 1,7 millones. Pues bien, el gobierno local ha reaccionado hoy de forma sorprendente: manteniendo la alcaldesa en rueda de prensa una postura y corrigiendo la misma simultáneamente para, una vez más y por encima de todo, defender lo indefendible.
Para rizar el rizo, la alcaldesa Pelayo desliza en esa misma 'perla' que habría algún tipo de interés en el PSOE por defender, antes que los intereses de los jerezanos, el interés de la empresa concesionaria, que recientemente también ha presentado una querella criminal contra el gobierno local por, entre otras cosas, presunta apropiación indebida. Pero la máxima responsable municipal olvida, sin malicia entendemos, que la cuestión aquí no es defender o no a la empresa. Es poner en evidencia una vez más la más que dudosa gestión administrativa y política que está llevando a cabo a cabo el equipo popular que ella dirige y cómo se siguen malgastando recursos públicos por su atropellado proceder al frente del Ayuntamiento. Algo, y esto si consideramos que es capital, que está repercutiendo en la calidad de vida de los jerezanos y en agravar aún más las famélicas arcas municipales.
La propia sentencia habla abiertamente de “peculiar expediente administrativo que figura en autos como antecedente de la resolución administrativa”, y además califica la actuación municipal de oscurantista diciendo que “entendemos que la oscuridad no puede beneficiar a su causante, y que la administración no ha sustentado su resolución en hechos y datos ciertos, objetivos, medibles y contrastables". Por ello, de entrada, dicha sanción inicial queda rebajada a más de la mitad. De algo más de 4 millones se queda en 1,7 millones. ¿Hubo precipitación? ¿Se pudo montar el expediente sancionador mejor si realmente se ajustaba a la realidad con hechos ciertos, medibles...? ¿Quién pierde aquí, quién debe a quién? Los tribunales han vuelto a hablar y nuevamente lo dicen bien alto y claro: las cosas no se están haciendo demasiado bien que digamos por estos lares en los tres últimos años. Por ser suaves.
Urbanos Amarillos renovó en 2011, aunque solo en parte, la flota, uno de los incumplimientos de los que le acusaba el PP, pero uno de los nuevos vehículos se quemó al parecer intencionadamente tras huelgas interminables Nunca más se supo qué pasó con aquel suceso ocurrido el 29 de septiembre de 2011.
Fuente: CNA Canal Noticias Andalucía