Alberto Núñez Feijóo ha pedido a los carteros de España que cumplan con su deber de hacer llegar el voto por correo, trabajando, si es preciso, mañana, tarde y noche, y hacerlo "con independencia". Estas palabras han entrado de lleno en el debate político, como no podía ser de otra manera, teniendo en cuenta que estamos en plena campaña electoral, ya que los partidos de izquierda han visto un ataque del líder popular a la empresa pública. Llegados a este punto, la pregunta es muy sencilla: ¿Se está produciendo, efectivamente, un atasco en Correos que puede desembocar en que haya ciudadanos que al final no van a ejercer su derecho o, por el contrario, se trata de un bulo que está corriendo y que ha recogido con fines electorales el candidato del PP?
Feijóo dice que simplemente se ha hecho eco de lo que piensan los dos grandes sindicatos, CCOO y UGT, mientras que ha salido el propio presidente Sánchez a decir que el candidato popular está "enfangando" el proceso electoral. Sea como sea hay un hecho muy importante a tener en cuenta en este asunto, como es que Feijóo fue durante casi tres años presidente de esta empresa, por entonces, entidad pública, en concreto entre mayo de 2000 y enero de 2003. Por eso, no dejan de ser declaraciones de alguien que ha conocido por dentro la casa, no son, digamos, las típicas declaraciones de político sin más fundamento que alimentar el debate del día.
Acabaría teniendo razón Feijóo cuando ha venido a decir que las reglas del juego quedarían socavadas si dentro de apenas diez días, cuando se vote, se constata que hay ciudadanos que al final no han podido ejercer su derecho al voto, pese a haberlo solicitado en tiempo y forma, porque Correos no ha previsto un despliegue a medida de una convocatoria de estas características. Pero, ahora mismo, no le falta razón a Correos cuando mantiene, en un comunicado, que este debate pretende socavar las instituciones y los servicios públicos del país –ojo, se refiere al debate, no expresamente a las declaraciones de Feijoó–.
Desde la izquierda, Yolanda Díaz se ha sumado al debate y no ha tenido reparos en ir un paso más allá que el presidente Sánchez y denunciar que en el PP "son expertos en manipulación", lo que ha desembocado en un intercambio de golpes en algunos medios y redes sociales, que han llegado a hablar de populismo y buscar similitud con las dudas que expresó Donald Trump sobre el funcionamiento de determinados medios públicos culpándoles de su derrota...
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