Fútbol y política, entre otras zarandajas

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El Análisis. Por Carlos Piedras.

El fútbol y la política han marcado todo el mes de mayo. De hecho, el “si se quiere y se trabaja… se puede” que lanzó Cholo Simeone durante la celebración de la victoria en la Liga del Atlético de Madrid fue el mensaje más comentado en los medios de comunicación en coincidencia con la campaña electoral de las elecciones europeas. Ya ven, qué tontería y qué significativo a la vez. Una simple relectura de la frase hecha “querer es poder” tapó cualquier atisbo de mensaje lanzado por los líderes de los partidos políticos, enzarzados en un aburridísimo debate sobre si Arias Cañete era machista o no después de que el candidato popular lanzara por las ondas un comentario que se debió haber quedado en la barra del bar.

El Atlético de Madrid finalmente no pudo redondear una temporada que hubiera sido de ensueño ganando la Champions, lo que vino a demostrar que no siempre se puede, por mucho que se quiera y se trabaje. Los poderosos, de ahí el adjetivo convertido en sustantivo, sí que pueden. Desde luego. Ahí estuvo el presidente de ACS y del Real Madrid con la cúpula pasada y presente del PP para demostrarlo. Hay dos hechos muy significativos: De una parte un ex presidente que sale de la oscuridad en el ‘festival’ de goles para chocarla con el presidente de ACS e inmediatamente vuelve a ella (e incluso, al menos en alguna repetición televisiva desaparece literalmente, hay gente que se ve que no conviene exhibir antes de unas elecciones) y un presidente que antes del partido manifiesta que es de bufanda.

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Miren, en la medida de lo posible creo que hay que dejar de lado la llamada corrección política, pero hay que recordar que el presidente del Gobierno fue a la final de la Champions con el dinero de todos, es decir, no se dejó de su bolsillo 2.000 pavos (viaje, hotel y entrada) para animar desde una grada normal llena de gente sudada comiendo bocadillos de chorizo a su Real Madrid, que además creo recordar que jugaba contra otro equipo español. A alguno le va a parecer que exagero, pero creo que con la tensión que había generado este partido (el Real-Atlético, me refiero) esta falta de neutralidad, esta otra incorrección política del PP, le ha costado varios miles de votos del lado rojiblanco, en una paradoja por lo demás curiosa, ya que la bofetada se la habrían dado en la cara a Arias Cañete, confeso seguidor del Atlético.

Pero el "si se quiere y se trabaja… se puede" de Cholo Simeone obtuvo premio la jornada electoral con Podemos. Este grupo, liderado por Pablo Iglesias –curioso nombre y apellido, aunque conozco varios casos similares: mi padre siempre cuenta que en su barrio, al norte de Madrid, pero lado obrero, una familia que se llamaba Castro puso a su hijo Fidel; también conozco a José Antonio Primo, que es hermano de mi amigo Javi, o a Francisco Franco, un antiguo trabajador de Diario de Jerez– ha sido, sin duda, la gran revelación de la elecciones europeas en España. Los seguidores de Podemos, como los de tantos colectivos que han ido surgiendo a lo largo de la crisis, tienen precisamente el ‘sí se puede’ como grito de guerra (o de ánimo, no se vaya a ofender a nadie), un eslogan que cabe deducir que proviene del Yes, we can utilizado por el señor Obama en una campaña estadounidense.

Ahora queda por ver qué puede hacer Podemos. De momento, pese al mensaje posibilista que emana de su propio nombre, parece inevitable la reproducción de patrones al menos similares al de los partidos tradicionales si el partido aspira a quedarse, que es lo verdaderamente complicado, y a realizar una selección más clara en su ideario, que es una especie de recova tecnológica de todas y cada una de las invenciones de la izquierda de los últimos treinta años con una cierta recuperación del marxismo que fue abandonando esa izquierda a medida que se fue dando cuenta de que Armani mola más (a ellos). En fin, Podemos por ahora ha podido, pero habrá que ver ocurre en el futuro en este grupo. Para mí, Podemos, por ahora es Veremos, porque como sabe perfectamente Cholo Simeone, no siempre se puede. Incluso queriendo. Y trabajando.

PD: Absténganse, en la medida de lo posible, los madridistas de decir que esto está escrito por un atlético lamiéndose las heridas. Ya se lo digo yo. No tengo para psicólogo… Salud a todos.