Devolución de fondos europeos en Cádiz: al final lo difícil siempre es gestionar

El anuncio del nuevo alcalde de que tendrá que devolver unos 5 millones de euros abre un debate sobre si se aprovecha de la manera más adecuada el dinero de Europa o prima el efectismo

Bruno García, alcalde de Cádiz, frente al Ayuntamiento de la ciudad.
Bruno García, alcalde de Cádiz, frente al Ayuntamiento de la ciudad. MANU GARCÍA

Fondos Edusi, la Iniciativa Territorial Integrada (ITI)... Los fondos de la Unión Europea (UE) vinculados al desarrollo de determinadas iniciativas son algo cíclico desde el ingreso de España, fondos que, habitualmente, necesitan de la cofinanciación, en determinado porcentaje, de alguna administración, bien sea la central, la autonómica, la provincial (Diputación) o la local. Es tradición que el uso de estos fondos forman parte del juego político, sobre todo cuando las iniciativas a las que se destinan al ámbito municipal, ya que muchas veces los alcaldes sacan pecho de iniciativas que han salido adelante con unos presupuestos de alguna manera 'dopados' por estos importantes fondos europeos, en los que casi nunca aparece un político o un funcionario europeo a la corta de efectuar una inauguración o cortar una cinta y se deja todo el protagonismo al alcalde.

Todo esto viene a cuento del anuncio por parte del nuevo alcalde de Cádiz, Bruno García, de que dicho ayuntamiento tendrá que devolver, con toda seguridad, algo más de 3 millones de euros correspondientes a dos proyectos de la ciudad que estaban contemplados a cargo de los fondos de la Edusi, y que incluso hay otros 2 millones que están en el aire. Los 3 millones que García da como seguros que hay que devolver corresponderían a la pasarela marítima de Puntales y el llamado plan 'Smart City'. ¿El motivo? Pues no es otro que todo tiene sus plazos y que ya no hay tiempo material para la licitación y seguir con el resto del proceso hasta fin de año.

Hace unos años en Jerez ocurrió algo similar a cargo de los fondos de la ITI, caso del Centro del Motor o la puesta en valor del río Guadalete desde el punto de vista del ocio y el turismo a través de la dotación de determinadas infraestructuras, como la apertura de senderos, embarcadero, etc, asuntos que se quedaron, digamos, en el tintero.

Bien, poniendo un ejemplo tipo 'como la vida misma', hay veces que no se puede, siempre hay imponderables, pero es un hecho que en muchas ocasiones los políticos se suman a estas iniciativas, consiguen el titular en los medios de comunicación... y bueno, luego las cosas se hacen o no, según. Ahora se está hablando de intentar prorrogar plazos en lo que se refiere a los temas de Cádiz que quedan colgando, pero es que haber, ha habido tiempo: el que se sabía desde un principio.

Al final, una cosa es el día a día de la gestión, saber gestionar, y otra muy distinta es que parezca que se hace y si hay algún problema culpar a otra administración. Puro efectismo. Y eso deberían tenerlo siempre en consideración los ciudadanos.

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