Los aerogeneradores de El Barroso: de ahora en adelante para el viñedo de Jerez

La Junta cierra la vía administrativa al declarar el polémico parque eólico de utilidad pública, lo que hace que cualquier iniciativa enoturística cuente forzosamente con la existencia de estas instalaciones

Uno de los aerogenadores del parque eólico de El Barroso, en Jerez, en una imagen de archivo.
07 de julio de 2023 a las 19:18h

La Junta de Andalucía acaba de cerrar la vía administrativa a las reclamaciones del sector vitivinícola jerezano sobre el parque eólico de El Barroso, ya que la declaración del mismo como de "utilidad pública" supone el fin agotamiento de este camino. Ahora mismo solo quedan 'vivos' los hechos puestos en conocimiento de la Fiscalía, pero a nadie se le escapa que las posibilidades de que se dé marcha atrás y se paralicen las obras –al ritmo que vamos, más bien habría que hablar de paralizar la entrada del parque en pleno funcionamiento– son cada vez menores y la situación empieza a ser muy complicada. La Junta no ha atendido ninguna de las 23 alegaciones que habían sido expuestas por los afectados, ni siquiera parcialmente.

Durante cosa de dos años, la Junta y el Ayuntamiento de Jerez han estado echándose mutuamente las culpas sobre las concesiones de licencias y el inicio de las obras por parte de la empresa Capital Energy. Desde un principio el Ayuntamiento ha dicho que no podía hacer nada ante las concesiones de la Junta como administración superior... y poco más, ya que para la Junta todo, igual que ahora, ha estado siempre en regla, por mucha "especial protección" y "patrimonialización" del viñedo que incluya el último PGOU de Jerez.

Lo que pasa es que El Barroso es un tema que va más allá del mal llamado 'juego político', ya que se trata de un parque eólico que va tener, que de hecho ya tiene, unos aerogeneradores de unas dimensiones impresionantes, que por fuerza, va a suponer un antes y un después en esta zona del viñedo del Marco de Jerez, atendiendo sobre todo a criterios como el impacto medio ambiental que tiene, lo que va a dificultar sobremanera que cualquier iniciativa relacionada con el enoturismo cuaje, por mucho tirón que tenga conocer Macharnudo.

Lo cierto también es que el sector vitivinícola de Jerez tampoco ha estado lo que se dice fino. No se ha ido mal, pero se ha ido tarde. Desde que algunos viticultores empezaron a mostrar su malestar, hasta que se organizaron y, finalmente, fue el Consejo Regulador el que tomó las riendas legales del asunto con la aquiescencia de todos los implicados, pasaron unos meses preciosos, mientras el 'monstruo', el parque eólico, seguía y seguía creciendo.

Habrá que ver qué dice la alcaldesa García-Pelayo, contraria al proyecto al menos en esa zona –realmente ese ha sido uno de los 'peros' de entrada a este parque eólico: por qué esa ubicación en uno de los municipios más grandes de España que tiene suelo para aburrir–, pero hace ya meses que el sentir general en el Marco de Jerez es que todo lo que se acuerde, todo lo que se decida sobre la preservación del viñedo de Jerez va a ser "de ahora en adelante", una manera de asumir que el parque eólico de El Barroso va a estar ahí, salvo enorme sorpresa, durante generaciones.