Desconozco qué tipo de geoestrategia lleva a la Junta a decidir soltar 250.000 eurazos para una película marroquí sobre el episodio de la isla del Perejil en clave satírica.
La verdad es que a veces los periódicos traen noticias de esas que hacen que se te atragante la ‘tostá’ (o la galleta integral, a elegir). Cuando lees en lavozdelsur.es un titular como La Junta de Andalucía financia una película marroquí con tres veces más de lo que aporta al Festival de Jerez en un año piensas que no puede ser, que algo tiene que estar mal, que el periodista, siempre de letras, se ha liado con los números o, siempre estresado, ha oído mal o tenía la cabeza en pagar el alquiler… Luego, cuando compruebas que error matemático no hay, viene un pequeño cabreo y, finalmente, caes en la resignación tan propia de la tierra aunque, pese a estar solo en casa, te oyes decir “joder”. Pero con doble o.
Desconozco qué tipo de geoestrategia lleva a la Junta a decidir soltar 250.000 eurazos para una película marroquí sobre el episodio de la isla del Perejil en clave satírica —la trama de la película para mí es lo de menos— pero lo que está claro es que si al Festival de Jerez le da del orden de 75.000 euros anuales, la ciudadanía no puede quedarse de brazos cruzados, igual que tampoco puede hacerlo el Ayuntamiento de Jerez… ah, no, perdón, que son del mismo partido, qué despiste, disculpas al lector e incluso a las propias instituciones mencionadas. Además seguro que existen poderosas razones para este dispendio, razones que a nosotros, simples mortales, huelga decir que se nos escapan…
Bueno, si el Ayuntamiento no puede, la que sí tiene capacidad de reivindicar es la reducida industria cinematográfica andaluza. Además de cotejar lo que cae en producciones de la tierra con lo que se ha aflojado para esta cinta foránea, invito a la industria a que para la producción de próximas películas se dirija por ejemplo a la (casi) vecina región de Tánger-Tetuán-Alhucemas, con capitalidad en la bonita ciudad de Tánger, para ver si se dejan caer algo, a ver qué ocurre…
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