Cuando hacemos referencia a la autoubicación política se indica la posición que los entrevistados al ser preguntados se asignan en una escala de 1 a 10 donde la posición 1 hace referencia a la “extrema izquierda” y la posición 10 a la “extrema derecha”. En el mismo sentido la identidad territorial nos indica la posición autoasignada en un continuo que, para el caso andaluz, abarca desde sólo sentirse andaluz hasta sentirse exclusivamente español.
Centrémonos en la primera de las variables sociológicas, la autoubicación política. En sus barómetros el Centro de Estudios Andaluces (Centra) pregunta sobre la ubicación política de los encuestados de la siguiente forma: "Cuando se habla de política, normalmente se utilizan las expresiones izquierda y derecha. En una escala de 1 a 10, donde 1 fuese la extrema izquierda y 10 la extrema derecha, ¿dónde se colocaría usted?".
Resulta especialmente interesante conocer la forma de la pregunta para interpretar correctamente los resultados. Sobre esta pregunta existe gran cantidad de literatura sociológica que sería complicado resumir en una pocas líneas, proponemos al lector responda a la pregunta de forma intuitiva, sin pensarlo demasiado ¿En qué valor se ha situado? ¿Ha tomado como referencia algún valor central? En otras palabras, ¿ha tomado como referencia el valor 5 para situarse como punto medio a partir del cual autoubicarse políticamente?
Pues bien, siga pensando en su valor, pero tenga en cuenta que la media de esta escala no es 5 como usted creía, la media de los valores para esta pregunta es 5,5. Primera consideración para interpretar correctamente los resultados de la pregunta de autoubicación política en los barómetros del Centra que mostramos a continuación:
Si prestamos atención a la tabla 1 podemos comprobar cómo los valores de las medias se sitúan bastante próximas al centro político en cada uno de los barómetros de los que disponemos microdatos. Igualmente, los valores de la desviación típica resultan muy similares dibujando una distribución bastante simétrica en torno a los valores centrales. Si nos fijamos en los otros estadísticos tanto Moda (valor que más se repite) como Mediana (Valor que divide la distribución por su mitad 50%) coinciden en el valor 5. Este hecho, como el lector habrá podido comprobar, viene a corroborar la inclinación de los encuestados a tomar como referencia el centro político cuando se les pregunta por su adscripción ideológica.
Media, moda y mediana casi coinciden dibujando distribuciones cuya principal característica es la simetría en sus valores. Esta particularidad puede interpretarse como la nula polarización de la sociedad andaluza con respecto al posicionamiento ideológico entre derechas e izquierdas, o lo que viene a ser lo mismo, la adscripción mayoritaria al centro político en Andalucía.
Por otra parte, en este análisis se propone articular autoubicación política e identidad territorial para intentar entender cómo se interrelacionan ambas dimensiones sociales en Andalucía. La identidad territorial tiene que ver especialmente con el sentimiento de pertenencia a la comunidad política nacional. La forma que tradicionalmente los barómetros han utilizado para preguntar sobre esta cuestión se enuncia en base a una escala Likert en la que en un extremo se sitúa la adscripción exclusivamente andaluza, en nuestro caso, y en el otro extremo la adscripción exclusivamente estatal. El Centra realiza esta pregunta únicamente en el barómetro de Junio-19. A continuación mostramos los resultados en tablas y graficados:
Interpretando muy brevemente los resultados saltan a la vista la adscripción mayoritaria de los encuestados a una identidad territorial ambivalente entre Andalucía y España. Para casi el 70% la identidad territorial bascula entre Andalucía y España a partes iguales. La identidad exclusivamente estatal es residual (1,9%) al igual que la exclusivamente andaluza (2,8%). Por bloques el agregado andalucista, suma de los que se declaran más andaluces que españoles o exclusivamente andaluces, supera al españolista. Frente a un casi 17% cuya identidad territorial es mayormente andalucista se sitúa un 9,7% de identidad españolista. La categoría ninguna de las anteriores y no sabe, no contesta no merecen ser tomadas en consideración por su escaso valor explicativo.
Vistas las dos variables de nuestro análisis toca interpretarlas de forma conjunta. Reseñar que realizada la prueba Anova de un factor los resultados resultaron significativos o lo que es lo mismo, las diferencias entre las medias son estadísticamente significativas por tanto éstas no son producto del azar.
Los datos reflejan un ascenso en la autoubicación política en tanto la identidad españolista aumenta. A mayor identidad españolista mayor grado de tendencia política hacia el espectro ideológico de la derecha. Por la otra parte, la identidad andalucista se sitúa más próxima a la izquierda. La adscripción identitaria ambivalente (tan andaluz como español) toma como valor medio en su Autoubicación Política una puntuación de 5,65.
A modo de conclusión cabe destacar dos aspectos reseñables:
1. La identidad territorial ambivalente es la mayoritaria en Andalucía.
2. El posicionamiento ideológico en Andalucía bascula mayoritariamente en torno al centro político.
Como ni existe ni se pretende una "sociología libre de valores”, el análisis anterior, una vez visto desde un exclusivo punto de vista exclusivamente objetivo, merece ahora en base al posicionamiento ideológico y la afiliación política del que suscribe una breve reflexión interpretativa y prospectiva. En primer lugar, creo existe un espacio andalucista amplio. Un espacio andalucista de identidad territorial fuerte y enraizado en el pueblo andaluz, sin embargo a la luz de los datos este espectro andalucista no resulta excluyente con respecto a la identidad territorial española. La identidad andaluza se cimienta en base a una relación de identidad y pertenencia a España como los datos muestran de forma explícita.
Por otra parte, los extremos políticos parecen no tener cabida en la sociedad andaluza. Proponer proyectos políticos andalucistas en base a una adscripción extremadamente izquierdista, o viceversa, pues aunque esto parezca imposible existir, existen, puede no ser mayoritariamente aceptada por la ciudadanía. Quizás y bajo mi estricta opinión, los proyectos políticos andalucistas deberían cimentarse en torno al espectro del centro izquierda para llegar a ser populares y con opciones electorales reales. Lo que no podemos negar es la posibilidad y necesidad de articular proyectos políticos andalucistas pues base de identidad territorial hay. Otra cosa es que nuestros héroes, líderes, lideresas y las formaciones políticas andalucistas a las que pertenecen, sepan articular el proyecto político andalucista que la sociedad andaluza demanda y necesita sin caer en los dogmatismos, personalismos y clientelismos a los que tristemente nos tienen acostumbrados.
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