Versos y paisajes de una artista completa
Lorena Asenjo (Utrillas, Teruel, 1986), con el seudónimo literario elcajondesastredelorelay, vive en Sevilla desde hace 6 años. Desde que era pequeña, con 4 o 5 años, tenía muy claro que quería ser artista. Siempre ha dibujado y pintado con diferentes técnicas pictóricas tradicionales y también digitales. En cada ilustración que hace siempre crea una pequeña historia para darle más profundidad al poema.
Lorena estudió bachillerato de artes en Teruel y estuvo estudiando la diplomatura de Ilustración Tradicional y Digital en Madrid, en la escuela Arte Neo. También es técnico en educación infantil, ha trabajado como profesora y auxiliar en escuelas infantiles y también como monitora, dando extraescolares de dibujo, pintura y art attack en diferentes colegios de Zaragoza.
En la actualidad, Asenjo se dedica al tatuaje, que desde 2019 ejerce en Sevilla. Asimismo, trabaja en el mundo de la ilustración como freelance. De El sentir de los latidos (Editorial Te publicamos), su primer poemario, lo ha hecho todo: escribirlo, diseñarle la cubierta y la contra y los dibujos que acompaña a los textos poéticos.
El sentir de los latidos habla de los pensamientos míos más profundos, con diferentes temáticas de la vida, que son importantes y que con las responsabilidades diarias las vamos dejando y no reflexionamos sobre ellas. Yo he querido transformar esos pensamientos en formato de poesía urbana. Cuando hablo de poesía urbana la gente se suele quedar con la poesía clásica, con esa poesía de palabras rimbombantes. Aquí lo que se va a encontrar son palabras cercanas y familiares, para que todo el lector se pueda identificar con cada uno de los escenarios.
"He querido transformar mis pensamientos en poesía urbana"
Llevo dibujando desde que soy pequeña. Siempre he estado con los lápices, las acuarelas, con cualquier técnica pictórica tradicional o digital. Siempre he estado pintando. Algo que tenía claro y que quería hacer era no solo escribir mi libro, sino poder expresarme a través de las ilustraciones para que le dieran un poco más de profundidad.
Sí. Soy yo siendo una cosa y la otra.
Muchos escritores, o las personas que nos leen, tienden a pensar que todo se basa en algo personal, pero realmente, la única poesía que se va a encontrar el lector y que es personal, es una que dedico a mi padre. Pero sí que es cierto que en la mayoría de esas poesías hay reflexiones, son vivencias que he tenido de forma cercana. Ahí he expresado mi opinión referente a esos temas; algunos bastante importantes como la violencia de género.
Sí, pero hay otros. Como cuando uno no sabe cómo continuar y está peleando por alcanzar algún sueño, alguna meta o un objetivo, pues sabes que hay veces que estamos arriba y otras que estamos abajo. En esas poesías explico que todo llega a su debido tiempo, que no hay que perder la esperanza y seguir hacia delante.
"En general, hoy la gente mira mucho más para afuera que para sí mismo"
Creo realmente que, hoy en día, en general, las personas miran mucho más hacia afuera que hacia sí mismo. Se preocupan más de lo que piensen los demás que de lo que piense uno mismo. Estamos viviendo en una sociedad donde hay muchos avances tecnológicos y muchas cosas, pero que creo que no se hace un buen uso de ello. La gente no se para tanto a hablar consigo misma, no se llega a conocer, no sabe realmente lo que quiere. Hay un batiburrillo de emociones y de sentimientos que no se llegan a desarrollar. Creo que es una de las causas de los problemas de salud mental.
Yo hablo muchísimo, y lo que he querido expresar en este libro con muy pocas palabras es decir esa verdad que, como has dicho antes, en muchas ocasiones, no se dice. El libro intenta que el lector vibre, le haga pensar.
Para mí, al ser artista, el tatuaje es una forma más de expresarme. Artística y personalmente.
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