Julia Sánchez, la maquilladora gaditana que dio el salto a Netflix: "El carnaval es mi mayor inspiración"

Su último trabajo ha sido como jefa de maquillaje y peluquería en Hierve (Filmin) con Stephen Graham, una película grabada en un plano secuencia, que ha sido ganadora y nominada a varios premios como los BIFA

Julia Sánchez durante el rodaje de la película inglesa 'Hierve' de la que ha sido directora de maquillaje y peluquería.
Julia Sánchez durante el rodaje de la película inglesa 'Hierve' de la que ha sido directora de maquillaje y peluquería. Alex Fountain

Del Carnaval de Cádiz a Filmin, pasando por Netflix

Julia Sánchez Merino (Cádiz, 1992) creció en la céntrica calle Barrié y aunque ahora la separen un par de miles de kilómetros, no pierde su esencia gadita. Estudió Bellas artes en la Universidad de Sevilla y posteriormente Hair makeup and prosthetics for performance en el London College of Fashion. Forofa del universo `timburtoniano` y los atardeceres en La Caleta, esta gaditana residente en Londres ganó la Ve Neil’s legends of makeup scholarship y pudo formarse en Cinema Makeup school de Los Angeles. Su primera película como jefa de peluquería y maquillaje fue Villano –puede verse en Netflix UK–, y su último trabajo destacable ha sido como jefa de maquillaje y peluquería en Hierve (Filmin) con Stephen Graham, una pelicula grabada en un plano secuencia, que ha sido ganadora y nominada a varios premios como los BIFA ganadora y nominada a varios premios como los BIFA. 

¿Cómo llega una graduada en Bellas Artes a la industria del cine inglesa?

El maquillaje ha estado siempre en mi vida. Empecé a relacionarlo con lo que hacía, que era bodypainting, y me di cuenta de que podía hacerlo como carrera profesional. Me vine a Londres porque en España no estaban los cursos que estaba buscando ni la formación que necesitaba. 

¿Guarda relación tu gusto por el maquillaje con el Carnaval de Cádiz?

Claro, siempre ha estado presente. Del carnaval recuerdo mucho a mi padre maquillándonos a mi hermana y a mí. Más tarde quise copiarlo, me regalaron una pequeña paleta de pinturas que me encantaba. Pintaba a mi hermana, a mis amigas, a mis vecinas... Y así empecé a interesarme por el maquillaje dentro del cine. Te fijas más cuando ves pelis o series. Aunque la base de todo es mi gusto por el carnaval y el interés por el arte. 

¿Qué tal la experiencia con la gran pantalla? Ya que empezaste en casa mostrando tus maquillajes 

Muy distinta, ya que empecé trabajando en mi piel y en la de mis amigos. Cuando pasas a trabajar con actores hay muchas cosas a tener en cuenta: protocolo, higiene, adaptarte a distintos tipos de piel... Lo bueno de Inglaterra y de Londres es que hay mucha variedad cultural, y puedo trabajar con diversidad de pieles y pelos. No tiene nada que ver trabajar en mí o en mis amigos que de manera profesional. Ha sido un aprendizaje y sigo aprendiendo muchísimo a día de hoy.

"Maquillar a actores o a personas que están acostumbradas a un trato profesional siempre da un poco de miedo" 

¿Y la responsabilidad en tu trabajo?

Maquillar a actores o a personas que están acostumbradas a un trato profesional siempre da un poco de miedo. De hecho, el día antes del comienzo de un rodaje nunca duermo. O antes de tener alguien nuevo en la silla no duermo bien porque estoy nerviosa. Maquillar tiene mucho que ver con el trato con la persona, el conocer al actor o a la actriz, saber sus gustos, cómo se siente... Eres su apoyo moral al comienzo del día. Te cuentan sus problemas o si están cansados. Entonces, depende del día, tienes que ver cómo se encuentran y de qué manera tratarlos o trabajar con ellos.

Es casi una labor psicológica

Un poco. Al principio me costaba porque no dominaba tanto el idioma, pero cada vez voy aprendiendo más. Hace tres o cuatro años me costaba más conectar con los actores porque me faltaba mucho vocabulario y soltura hablando. Ahora cada vez mejor. Es importante saber conectar y que confíen en ti, ya que tú eres la persona que va a hacer que se vean bien en cámara.

En tu trabajo personal predomina la temática fantástica. ¿Por qué?

Lo veo más interesante. Ojalá todos los trabajos que me salieran fueran de cosas fantásticas, criaturas y monstruos. Me parece lo más divertido, pero no siempre sale así. Me gusta inspirarme en el mar y en todas las criaturas marinas, quizás porque vuelvo a mis raíces en Cádiz. Vuelvo también al Carnaval, a los personajes que vemos todos los días.

¿Echas de menos tu ciudad?

Por supuesto. Siempre siempre (ríe).

¿Qué ha hervido hoy en tu cocina?

Hoy fueron macarrones, pero ayer papas con carne.

Se acerca febrero y parece no haber consenso carnavalero. ¿Cómo lo vives desde la distancia?

Justo hablé ayer con mi pareja de que si estuviéramos en una situación normal, a partir de las ocho de la tarde ya nos podríamos sentar en el sofá a ver el concurso en Onda Cádiz. Lo echamos un montón de menos porque, aunque preliminares a veces sea un rollo, lo pones y te sientes en casa. Ha habido mucho revuelo con eso de que el carnaval sea en verano, pero mejor tenerlo que no tenerlo. Si es algo temporal que no va a ser para siempre, ¿por qué no? Y si en febrero es seguro hacerlo y pueden salir las ilegales de manera a la calle, por supuesto que sí.

"A Kichi le haría un maquillaje carnavalesco con muchos colores"

Entonces, ¿vas a cuadrar tus vacaciones de verano para poder venir al carnaval?

Ojalá. Siempre lo intento, aunque junio es mala fecha para mí. El año empieza tranquilo y a partir de marzo tengo mucho trabajo. Junio suele ser un mes de mucho curro. No sé qué va a pasar este año, pero ojalá que sí. 

¿Qué maquillaje le harías al Kichi?

Al Kichi me lo imagino como un payaso, con mucho colorido y alegre. Me transmite alegría, no sería ningún monstruo. Le haría un maquillaje carnavalesco con muchos colores.

¿Algún sueño por cumplir?

El año pasado tuve la oportunidad de cumplir un sueño: trabajar con el director por el que realmente estoy en el mundo del cine. Es un proyecto que se estrena este año en Netflix, no puedo decir nada más por ahora.

Sobre el autor:

Carmen Marchena

Carmen Marchena

Gaditana. Periodista feminista por vocación y compromiso. Empecé en las redacciones de Ideal Granada y Granada Hoy. He pasado por eldiario.es/Andalucía. Parte de El Salto Andalucía desde sus inicios. Tengo dos ídolas: mis abuelas Carmeluchi y Anita. Defensora de los Derechos Humanos y la Memoria. Sin más dilación, papas con choco o barbarie.

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