Un viaje de ensueño es lo que quieren experimentar todas las familias cuando disponen de días de vacaciones y ahorros. Son muchos los preparativos para que todo salga a la perfección, como la reserva de hoteles o los vuelos. Sin embargo, en muchas ocasiones se descuida la parte más importante, la seguridad. Para hacer frente a los imprevistos -nadie está exento de toparse con alguno- es recomendable contratar un seguro de viaje.
Aunque no es obligatorio un seguro de viaje a Japón o a Italia, es muy aconsejable acogerse a uno de ellos ya que el coste de los problemas que puedan suceder podría ser mucho mayor de lo esperado. Para que no haya sorpresas y la familia, pareja o amigos disfruten al máximo de su escapada se recomienda incluir, al menos, las coberturas básicas para estar preparados en caso de sufrir un accidente o de acabar en el hospital.
En algunos países el seguro de viajes es obligatorio para acceder al territorio como Rusia o Cuba. Por eso, es necesario investigar las condiciones de cada destino y tener en cuenta las opciones antes de contratarlo.
Estas pólizas sirven, sobre todo, para evitar percances durante los días de descanso y deben incluir una serie de garantías con respecto al equipaje o la salud. Por ejemplo, debe ofrecer una asistencia sanitaria de 24 horas y nunca habrá que adelantar dinero por ella. En este sentido, los viajeros dispondrán de un servicio de calidad y rápido sin costes adicionales. Además si los sanitarios hablan en otro idioma, la aseguradora pondrá un intéprete a su disposición y enviará medicamentos en caso de que no se encuentren en el país del viaje.
El seguro de viaje también garantiza la repatriación y transporte de heridos o fallecidos en caso de que ocurran males mayores, y una ambulancia hasta el hospital. Además, el contrato debe cubrir la pérdida de equipaje de forma que facilite uno de sustitución para no tener que cancelar el viaje. A su vez, si se está demorando la llegada de las maletas facturadas, la compañía puede localizarlo y dará una compensación por los gastos de más.
Otra de las coberturas recomendadas es la indemnización por accidente. En caso de que suceda una tragedia, ofrecerá una suma de dinero a los afectados. En este punto, se incluyen los accidentes ocurridos viajando en medios de transporte del país.
Asimismo, se encargará de la cancelación con reembolso con el fin de que se recupere el dinero invertido si finalmente no se puede disfrutar del viaje preparado. Es una forma de asegurar que anular los planes no va a suponer perder dinero.
Por otro lado, el seguro de viaje aporta información a los clientes sobre cualquier consulta, desde la anulación de tarjetas de crédito en el país hasta enviar de vuelta un objeto que los viajeros hayan olvidado en el hotel. También proporciona asesoramiento sobre la documentación necesaria en diversas situaciones o cómo actuar ante los problemas más comunes por los que se usan estas pólizas.
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