En los últimos tiempos la forma de pagar ha experimentado una revolución. Son muchas las personas que se olvidan de las tarjetas físicas para sumarse a una alternativa más cómoda y segura, sobre todo para realizar compras por internet. Las tarjetas prepago virtuales son gratuitas, no presentan gastos de mantenimiento y no implica un cambio de banco para usarlas.
Las ventajas de la tarjeta virtual son muchas, por lo que, su utilización está cada vez más extendida entre la población de cualquier parte del mundo. Con solo instalar la aplicación en el móvil, ya es posible administrar la tarjeta Plazo, que es una de las opciones existentes para poder disfrutar de este servicio. Esta permite retirar dinero en cualquier cajero hasta 300 euros diarios y dispone de Certificado SSL y protocolo de encriptación TLS.
Todos los pagos y compras están protegidas contra el fraude y, en caso de robo o pérdida es posible desactivarla con un solo clic.
Este tipo de tarjeta se crea en menos de cinco minutos y se activa de forma inmediata. Además, se puede usar en cualquier establecimiento con Terminal Punto de Venta (TPV) donde tan solo habrá que acercar la tarjeta virtual al terminal. Para empezar a pagar, es precido agregarla a Google Wallet o Apple Pay.
Otros de los beneficios de este medio son las recompensas que ofrece por las compras. De este modo, reembolsa hasta un 40% de las compras realizadas en una amplia variedad de marcas de primer nivel y devuelve un 3% en las adquisiciones de cualquier supermercado, nacional e internacional, y un 1% en el resto.
¿Qué son las tarjetas prepago?
Una tarjeta prepago es aquella que permite llevar a cabo operaciones sin disponer de una cuenta bancaria asociada. Es decir, el proveedor de esta tarjeta crea una especie de monedero virtual con una cuenta por internet.
Son una buena opción para ser utilizadas con seguridad para pagos por internet o para determinadas actividades, como comprar gasolina o para un viaje concreto.
La manera más fácil y común de recargarlas es mediante una transferencia, aunque existen otras opciones adicionales como recargar con la tarjeta de otro banco o con Bizum. Entre las principales características de este tipo de tarjetas destacan su facilidad a la hora de recargarse y el control del gasto.
Cuentan con el respaldo de Visa o Mastercard, por lo que se pueden usar en casi cualquier establecimiento de todo el mundo y tienen una numeración única. También poseen un código pin de seguridad e incorporan nuevos sistemas de autenticación como clave pin y validación del código de un solo uso recibido por sms.
Estas tarjetas duelen estar asociadas a descuentos y programas de puntos, en caso de ser emitidas por un establecimiento concreto, como un supermercado o un centro comercial. En su mayoría, son usadas por personas con pocos ingresos o ingresos irregulares, estudiantes, viajeros jóvenes o menores de edad.
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