Las asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA) de diversos centros públicos de Sevilla han expresado su rechazo a la iniciativa presentada por el grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento, que propone la supresión del Programa de Lengua Árabe y Cultura Marroquí (PLACM). Consideran que dicha propuesta se basa en argumentos falsos, genera desinformación y promueve un discurso que atenta contra la convivencia y la diversidad cultural.
El PLACM es una iniciativa de cooperación internacional gestionada por la Junta de Andalucía en coordinación con la Fundación Hassan II, la Embajada de Marruecos en España y el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes. Según las AMPA, el programa se imparte con profesorado funcionario marroquí, seleccionado según criterios oficiales, de forma similar a como el Instituto Cervantes despliega docentes españoles en otros países. Destacan que no supone un gasto para el erario público español.
En el comunicado explican que las clases de lengua árabe se desarrollan fuera del horario lectivo y con la autorización de la Consejería de Educación, siguiendo un modelo comparable al de otras actividades extraescolares. Los centros escolares, aseguran las asociaciones, aprueban su realización de acuerdo a la normativa vigente y dentro de su autonomía organizativa.
Desde los colectivos de familias se subraya el carácter voluntario e inclusivo del programa, abierto a todo el alumnado con independencia de su origen. En varios colegios de Sevilla, indican, han participado niños y niñas de familias españolas que han mostrado interés en aprender una lengua extranjera más, por razones culturales, lingüísticas o académicas.
Contra la libertad de las familias
Las AMPA consideran preocupante que se intente restringir la libertad de las familias para elegir actividades educativas complementarias. A su juicio, aprender árabe no favorece la segregación, como sostiene Vox, sino que amplía las oportunidades educativas y sociales del alumnado, especialmente en un contexto en el que muchos menores ya dominan el español y otros idiomas.
Frente a las acusaciones de que el PLACM forma parte de un proceso de islamización, las asociaciones recuerdan que se trata de una enseñanza laica, regulada por las autoridades educativas y sin vínculos con contenidos religiosos. Añaden que, al igual que otras religiones reconocidas en España, el islam cuenta con profesorado que imparte sus contenidos en horario lectivo según los marcos establecidos por ley, sin que ello haya generado problemas de convivencia en los centros escolares.
En su comunicado, las AMPA concluyen que la propuesta de Vox no responde a una preocupación educativa real, sino que supone un ataque a un programa que desde hace más de diez años ha contribuido a la integración, el respeto intercultural y el aprendizaje del árabe, una lengua con presencia global y relevancia creciente en el ámbito académico y profesional.