Sentimiento cofrade y devoción en el último domingo de Cuaresma en Sevilla. Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, los fieles se han desplazado a distintas iglesias para participar en emotivos besapiés. Un día de oración y recogimiento que también ha estado protagonizado por el pregón, pronunciado por el periodista y director de Canal Sur Radio, Juan Miguel Vega, en el Teatro de la Maestranza.
La iglesia de San Martín de Tours ha acogido el besapiés al Cristo de la Sagrada Lanzada y besamanos a la Virgen del Buen Fin, de la hermandad de La Lanzada, de 10.30 a 20.30 horas.
Por su parte, los devotos de La Cena han acudido al besapiés al Señor de la Sagrada Cena, en la iglesia de los Terceros, en horario de 10.30 a 14.30 horas y de 16.30 a 20.30 horas. A las 11.30 horas se ha celebrado una misa de hermandad.
La parroquia de Omnium Sanctorum ha acogido el besapiés al Cristo de las Almas, de la hermandad de Los Javieres, en horario de 10 a 20:30 horas.
GALERÍA | Besapiés y besamanos en el último domingo de Cuaresma en Sevilla
El pregón "íntimo" de Sevilla
Paralelamente a estos actos, Juan Miguel Vega (Sevilla, 1962) ha proclamado el pregón, plagado de hermosos pasajes de su infancia, de episodios emotivos, de versos dedicados a la Esperanza Macarena y a hermandades del barrio de Triana, de reconocimientos a ilustres cofrades, con algunos toques de gracia, anécdotas y sorpresas.
"Si esta Fiesta Mayor fuera ortodoxa, todas las cofradías serían iguales, no habría maneras distintas de llevar los pasos, los nazarenos se vestirían del mismo modo y el comportamiento de las hermandades sería exactamente mimético", ha expresado.
En el Pregón ha habido continuas referencias a su experiencia como cofrade, basada, fundamentalmente, en dos hermandades: San Bernardo y El Amor, a su vinculación familiar con el barrio de Triana y el viejo arrabal junto a la fábrica de Artillería, a las Esperanzas de Triana y la Macarena y al Señor del Gran Poder, y que ha empezado con continuos elogios a Sevilla y el orgullo de haber nacido aquí, "donde también me despediré".
"Por leal, noble y mariana, ser sevillano es un orgullo. Además, eres invicta, así que sobran tapujos. Para mí eres lo más grande y aquí se acaba el asunto. Que sí, hombre, que habrá otras por ahí que valgan mucho Pero como tú, Sevilla, no hay nada igual en el mundo".
En el pregón ha tenido cabida el paso alegórico del Triunfo de la Santa Cruz, el tradicional paso de 'La Canina', de la hermandad del Santo Entierro. "Sí, lo sé, no 'semos' nada. Y tú llegando al Ocaso. No hay quien evite el repaso de tu afilada guadaña, la mejor que hay en España por aguda y astifina. Tu bajío nos fulmina más. Te llevamos muy dentro. Ven y sal a nuestro encuentro no nos das miedo, Canina".
El barrio de San Bernardo, "un mundo aparte", y el Cristo de la Salud, "el que está en mis penas", ha tenido el protagonismo esperado en su alocución, al igual que la Virgen del Refugio, titular de la corporación del Miércoles Santo. "Siempre con cara de niña aunque pasen muchos años. El Refugio de María, lo mejor de San Bernardo", ha declamado.
Juan Miguel Vega también ha apelado a los cofrades para reconocer públicamente y sin tapujos que profesan la fe católica y ha destacado la importante labor que realizan las hermandades y cofradías en el seno de la Iglesia. "Creo en Dios; qué pasa", ha sentenciado al término de ese pasaje, respondido por el público que se ha congregado en el espacio escénico del Paseo Colón con un prolongado aplauso.
El Señor de Los Gitanos también ha tenido protagonismo sobre el escenario del Maestranza. "Dale salud a los vivos y paz a los que descansan. Y que tu Madre la Virgen por el amor coronada consuele nuestras angustias y lleve al corazón calma. ¡Ay Cristo de los Gitanos, Señor de la Madrugada! Tú eres la luz que en Sevilla ilumina la mañana".
"Solo faltan siete días, queda apenas un suspiro. A todas partes que miro, hay luz en la mirada. Sevilla no dice nada, más brilla como un zafiro. Está aquí, aquí asomada. Ya será Semana Santa, cuando al pasar la semana, claree la mejor mañana y el sol bese a la giganta, mientras suena a Font de Anta", ha pregonado Vega.
Los últimos versos han estado dirigidos a la corta espera para el Domingo de Ramos. "Será Semana Santa, cuando vea sobre el terreno, ese primer nazareno, que a la niña chica espanta, pero ante el que el alma canta, porque ya está aquí lo bueno. Y será Semana Santa, en la tierra sevillana, cuando aquel alma temprana, semilla de nuestra planta, con un nudo en su garganta, pida la venia en campana... Ahora ya, no lo soñamos, llegó al fin lo que esperamos. La maravilla del cielo azul de Sevilla en un Domingo de Ramos. He dicho".
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha calificado de "magnífico" a este texto. "Sus amigos sabíamos ya que iba a ser un magnífico Pregón, que iba a ser el que él se merece dar. Creo que ha sido un texto religioso, íntimo, profundo, valiente, popular, heterodoxo: creo que lo reúne todo", ha dicho.
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