El TSJA ha dado la razón a la caseta familiar que perdió sus tres módulos en la Feria de Abril de 2022 por una cuestión burocrática, al entregar la solicitud de renovación fuera de plazo, una decisión que es una bomba para la situación del Real.
En una sentencia, a la que ha tenido acceso lavozdelsur.es, la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía quita la razón al Ayuntamiento de Sevilla, a la que inicialmente se la había dado un juzgado, debido al recurso presentado por una ciudadana como responsable de la caseta.
Todo tiene su origen en el número 173 de la calle Juan Belmonte, que, como muestran los listados de casetas de ediciones anteriores, está explotada en modalidad de caseta familiar a nombre de Juan Muñoz Noguera.
Los encargados de la caseta entregaron la solicitud de renovación el 17 de noviembre de 2021, un plazo que tenía lugar entre el 1 y el 15 de noviembre. La cuestión es que tuvo lugar en época de pandemia, por lo que la resolución de la junta de gobierno local que les retiraba la caseta no fue legal.
En concreto, el TSJA ha estimado una serie de correos enviados por la administración pública, por el Ayuntamiento de Sevilla, en el que el consistorio se comprometía a potenciar la tramitación administrativa, y a comunicar de forma correcta todos los plazos.
Aunque eran mails meramente informativos, según la sentencia, la afectada estaba convencida de que recibiría aviso por correo electrónico, en relación a los plazos de la Feria de 2022, razón que provocó que entregase los papeles fuera de plazo.
Además, el Ayuntamiento había explicado que el aviso sobre plazos se incluiría en el tablón de edictos municipal, algo que no ha quedado fielmente constatado por el Ayuntamiento. Por todo ello, el juzgado obliga a reconocer la titularidad de la caseta a la familia Muñoz Noguera.
Los Muñoz Noguera son familia política de la presentadora de televisión Ana Rosa Quintana. Con tres módulos, es una caseta importante en la calle Juan Belmonte. El marido de Quintana es Juan Muñoz Támara, cuyo padre era un aparejador de apellidos Muñoz Noguera y nombre Fernando, de la caseta.
Ahora, el actual ejecutivo municipal se ve, a menos de un mes del inicio de la Feria de Abril, en el compromiso de devolver los tres módulos, que posteriormente fueron otorgados a quienes llevaban años en lista de espera, generando un perjuicio que solo podría solventarse por medio de acuerdo con los afectados o por vía de reclamación.
Está por ver si esta sentencia se ejecuta durante la presente Feria o si ya habría que esperar a la siguiente. En cualquier caso, una problemática más que se une a una situación muy parecida a la sufrida por el PSOE de Sevilla.
Además, podría servir como jurisprudencia para que caseteros que perdieron esa condición por una cuestión burocrática en los últimos años, los posteriores a la pandemia (ediciones de 2022, 2023 y la próxima de 2024) abriesen recursos contra el Ayuntamiento de Sevilla.
El Ayuntamiento lleva tiempo barajando la opción de una ampliación de la Feria. Una situación más justificada que nunca si, efectivamente, hay que devolver módulos a entidades o familias que los perdieron, y a la vez mantener a los que se les ha otorgado en el último lustro.