El Tranvibús, el nuevo sistema de bus de tránsito rápido (BTR), ha comenzado a funcionar desde Sevilla Este y Torreblanca hasta Nervión. La obra, que ha supuesto una inversión de más de 21 millones de euros, arranca con la promesa de agilizar los desplazamientos en el distrito más poblado de la ciudad.
“Hoy entra en funcionamiento la primera fase que unirá Sevilla Este con Nervión y ya se han iniciado las obras de la segunda fase que concluirá el trayecto hasta Plaza del Duque”, señaló Sanz, que apuntó que los trabajos en esta siguiente etapa concluirán previsiblemente en julio, con un coste adicional de 7,3 millones de euros.
La línea ofrece 16 paradas en ambos sentidos, una frecuencia de paso de 10 minutos y un recorrido que se completa en apenas 25 minutos. El Ayuntamiento calcula que en esta primera etapa dará servicio a 9.000 pasajeros diarios, lo que supondría retirar de la circulación hasta 400 vehículos cada hora. Una cifra que se dispararía hasta los 25.000 usuarios cuando la línea alcance la Plaza del Duque.
Aparte de una cuestión de movilidad, el asunto tiene también mucho de social, porque si bien Sevilla Este es una zona de expansión de la ciudad, Torreblanca es una barriada antigua que siempre estuvo alejada, azotada por cortes de luz, por estigmas... Que sea ahora conectada en unos minutos con Nervión y luego con el puro centro puede tener consecuencias muy positivas en el largo plazo.
El alcalde ha querido dejar claro que el proyecto “no viene a sustituir” la reivindicación histórica de Sevilla Este: la línea 2 del Metro. El tranvibús no anula el proyecto del Metro, que es la solución "que siempre he defendido y que seguiré reclamando".
Ocho kilómetros y 14 paradas
Las avenidas que conectan con Sevilla Este han perdido un carril para habilitar el trazado exclusivo del Tranvibús y, como consecuencia, los atascos se han multiplicado en los accesos a la ciudad. Vecinos y asociaciones han mostrado su malestar mientras el Consistorio insiste en que el sistema es “moderno, ágil y sostenible”, implantado con éxito en ciudades como Barcelona, Estrasburgo, Estambul o Montreal.
De momento, el Tranvibús recorre más de ocho kilómetros y 14 paradas, desde Torreblanca hasta Santa Justa, con vehículos 100% eléctricos de 18 metros de longitud y capacidad para 130 pasajeros. Los billetes se validan en las paradas y el coste será el mismo que el de cualquier autobús de Tussam.
El reto ahora es que el servicio llegue en el futuro al corazón de Sevilla, con obras ya en marcha para extender el recorrido hacia la Plaza del Duque. Un proyecto que se solapará con nuevas actuaciones urbanísticas previstas hasta 2029 y que, según el Ayuntamiento, marcará un antes y un después en la movilidad de la capital andaluza.