La angustia crece en Coria del Río, en Sevilla, tras la desaparición de Antonia Salas Gómez, una mujer de 65 años que fue vista por última vez el 15 de septiembre. Su caso ha encendido todas las alarmas debido a que se encuentra en una situación catalogada como de alta vulnerabilidad y, según han advertido las asociaciones que la buscan, necesita medicación.
Antonia mide 1,58 metros de estatura, pesa en torno a 40 kilos y presenta una complexión delgada. Tiene el cabello negro corto y los ojos verdes, además de usar un audífono en el oído izquierdo, un detalle importante para su identificación. Las plataformas de búsqueda remarcan que se trata de una desaparición urgente y que cada minuto cuenta.
La difusión del caso se ha multiplicado en las últimas horas a través de ONGs de rescate y de la Asociación Sosdesaparecidos, que han lanzado carteles con su fotografía y datos físicos para facilitar su localización. Los colectivos piden la colaboración ciudadana: cualquier persona que pueda aportar información relevante debe ponerse en contacto de inmediato con los teléfonos facilitados. Entre ellos, el 607 11 83 75 de los equipos de rescate o el 868 286 726 de Sosdesaparecidos. También se puede escribir a la dirección de correo info@sosdesaparecidos.es.
Está en riesgo su salud
El entorno de Antonia insiste en la gravedad de la situación: la mujer requiere tratamiento médico y su ausencia prolongada supone un riesgo para su salud. “Necesita medicación”, subrayan de manera clara en los avisos publicados.
La llamada a la solidaridad se extiende no solo en Coria del Río, sino en toda la provincia de Sevilla. Cada pista, por pequeña que parezca, puede ser decisiva. Los familiares, los cuerpos de seguridad y las asociaciones implicadas solicitan que cualquier persona que crea haberla visto o que disponga de algún dato, lo comunique de inmediato para acelerar la búsqueda.
