Un agente de la Policía Nacional destinado en Sevilla salvó la vida de un niño que se había atragantado con un trozo de tortilla durante la cena. El menor perdió la consciencia en el domicilio familiar tras el incidente, lo que generó una situación de gran tensión para sus padres.
El policía, que en ese momento se encontraba fuera de servicio, acudió rápidamente al escuchar los gritos de auxilio de la madre. Al llegar, encontró al niño inconsciente y procedió a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) durante aproximadamente quince minutos, hasta la llegada de los servicios de emergencia.
Los profesionales sanitarios que atendieron al menor destacaron que la RCP fue realizada de forma impecable, lo que permitió salvar la vida del niño. Después de 26 días hospitalizado, incluyendo 19 en la unidad de cuidados intensivos pediátricos, el menor evoluciona favorablemente y se encuentra en proceso de recuperación.
Agradecimiento de la familia
La familia ha expresado su agradecimiento hacia el agente, resaltando su vocación de servicio, profesionalidad y valentía en una situación de máxima urgencia. Este reconocimiento pone de relieve el compromiso y la preparación constante de los miembros de la Policía Nacional.
Este suceso subraya la importancia de la formación en primeros auxilios para la población en general, así como la dedicación y capacidad de actuación de los agentes policiales, que en este caso actuaron con rapidez y eficacia fuera de su jornada laboral.