Cientos de sevillanos han vuelto a mostrar su solidaridad con Palestina casi dos años después de que Israel comenzara la ofensiva en Gaza. A última hora del domingo, cuando las temperaturas lo han permitido, una ola de solidaridad se ha dado cita en el muelle de la Sal de la capital hispalense, junto al Puente de Triana, uno de los lugares más transitados de la ciudad.
En la protesta hubo pancartas pidiendo parar el genocidio que está sufriendo la población gazatí ante la inacción de la comunidad internacional. Además, al acto han asistido representantes políticos de diferentes formaciones, así como organizaciones de la sociedad civil como el caso de Ustea, sindicato dedicado al ámbito educativo. Esta concentración se enmarca dentro de las diferentes protestas que se están llevando a cabo en varias provincias andaluzas. Horas antes, en la provincia de Cádiz una marcha multitudinaria recorrió varios municipios de la Bahía.
Israel sigue con su ofensiva
Este mismo domingo, Israel ha matado al menos a 66 palestinos en la Franja de Gaza durante la jornada de este domingo, según informó la agencia Wafa, citando fuentes médicas del enclave. Del total, alrededor de 33 personas habrían sido atacadas directamente mientras intentaban recoger alimentos. La cifra se produce un día después de que al menos 85 palestinos murieran en ataques israelíes, 43 de ellos en la ciudad de Gaza, según reportes del Hospital Al Shifa y la clínica Sheikh Radwan.
Las operaciones israelíes se centran actualmente en el barrio de Zeitún, en la capital de Gaza, donde las autoridades de Tel Aviv han aprobado la ocupación total. La campaña militar ha generado un alto número de víctimas en los últimos 20 meses, periodo durante el cual el Ministerio de Sanidad de Gaza calcula que más de 63.000 personas han perdido la vida y más de 159.000 han resultado heridas.
El conflicto también ha provocado muertes relacionadas con la escasez de alimentos. Desde el inicio de la ofensiva israelí, 332 gazatíes, incluidos 124 niños, han fallecido por hambre y desnutrición, según las autoridades sanitarias locales. La situación se ha visto agravada este verano por el bloqueo casi total a la entrada de alimentos y medicinas impuesto por Israel, que controla todos los accesos al territorio.
