La Policía Nacional ha detenido a quince personas en Sevilla en el marco de la Operación Artemisa, desarrollada dentro de la Operación Leda, tras desmantelar un punto de venta de drogas situado en una zona considerada de especial conflictividad. En el operativo, los agentes intervinieron dos armas de fuego, abundante munición y diversas cantidades de sustancias estupefacientes. La actuación, ejecutada el pasado mes de octubre, culminó tras meses de investigación sobre una organización criminal dedicada al tráfico de drogas.
Durante la intervención, los agentes llevaron a cabo ocho registros de manera simultánea en distintos inmuebles vinculados con el grupo investigado. En el dispositivo participaron más de 200 policías de diferentes unidades especializadas, entre ellas Medios Aéreos, GOES, UPR, Guías Caninos, Unidad de Subsuelo y Caballería. La coordinación permitió sorprender a los sospechosos mientras desempeñaban sus funciones o se encontraban en sus domicilios.
La investigación permitió identificar a los miembros de la organización y determinar el papel que cada uno desempeñaba en la cadena de distribución. Según la información policial, el grupo contaba con una estructura jerarquizada y mecanismos de abastecimiento que garantizaban el suministro constante de droga al punto de venta. En uno de los inmuebles se hallaron dieciocho personas consumiendo sustancias en el momento de la intervención.
Las cantidades incautadas
En los registros se incautaron cantidades variables de marihuana, cocaína, heroína y hachís, además de comprimidos ansiolíticos, balanzas de precisión y material destinado a la preparación y distribución de drogas. Los agentes también confiscaron dinero en efectivo, fraccionado en billetes pequeños, y diversos dispositivos recreativos presuntamente empleados por los detenidos.
El punto de venta contaba con un sofisticado sistema de seguridad, compuesto por una triple puerta de acero con sistema de esclusa, ventanas reforzadas con planchas metálicas y cámaras ocultas que ofrecían visión exterior en tiempo real. Estas medidas pretendían dificultar el acceso de la Policía y proteger las actividades ilícitas del grupo.
A los quince detenidos se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico. Tras la operación, las autoridades destacaron que la intervención ha supuesto un golpe significativo a la distribución de sustancias estupefacientes en una de las zonas más conflictivas de la capital andaluza.