El nuevo Hermano Mayor de la Macarena no ha empezado su mandato al frente de la corporación todo lo bien que podría. Este fin de semana se ha llevado a cabo la toma de posesión de toda su Junta de Gobierno. Sin embargo, para sorpresa de todos, ha habido una ausencia. La Hermandad no tiene prioste a pocos días de que se celebre el tradicional besamanos, un acto que Fernando Fernández Cabezuelo quería llevar a cabo en la Parroquia de San Gil.
La Hermandad, en un comunicado, ha dado a conocer los hechos ocurridos para que, pese a estar presente en la candidatura, el prioste haya decidido no tomar posesión de su nuevo cargo. La idea de Fernández Cabezuelo es que fuera la Junta saliente la encargada de organizar el besamanos. Sin embargo, el equipo José Antonio Fernández Cabrero declinó la oferta. A partir de ahí, según los actuales dirigentes de la corporación se retomaron "de urgencia" los actos preparatorios.
Fue entonces cuando surgieron "discrepancias y desavenencias con el Prioste electo de Nuestra Señora de la Esperanza en cuanto a los métodos habituales y actuales de montaje del Altar y las decisiones colegiadas de la Junta de Gobierno electa". En un principio, en el seno de la Hermandad había cierta confianza en que se pudiera reconducir la situación, pero el tiempo ha concluido este fin de semana con la toma de posesión y no ha habido ningún acuerdo.
El conflicto
"Se esperó hasta la mismísima Toma de Posesión para que el Prioste electo de la Esperanza acudiera junto a los demás miembros de la Junta de Gobierno electa, hecho que, tristemente, no sucedió, siendo informado previamente del desencuentro el Rector de la Basílica y Director Espiritual de la Hermandad", comenta la nueva Junta.
Esto deja la Priostía vacante a pocos días de que tenga lugar un acto central en la Hermandad. No obstante, el Hermano Mayor hará una propuesta en las próximas horas que necesita "el visto bueno de la Junta de Gobierno y la pertinente confirmación por parte de la Autoridad Eclesiástica".



