Tres días después del temporal que afectó gravemente la red ferroviaria, dejando sin conexión a las provincias de Sevilla y Cádiz, Renfe ha anunciado la reanudación de la circulación entre ambas capitales. A las 9.12 de la mañana, la operadora informó de que se había "reanudado la circulación ferroviaria entre Sevilla y Cádiz, en ambos sentidos, tras ser reparados los daños derivados del temporal en Andalucía".
El restablecimiento llega tras jornadas de intensos trabajos en la zona afectada, donde el viento y las lluvias del pasado 29 de octubre provocaron daños estructurales significativos en varios tramos de la línea. Técnicos de mantenimiento e infraestructura han intervenido de manera continuada para devolver la operatividad a uno de los corredores ferroviarios más transitados del sur peninsular.
Renfe también ha avisado de que "el servicio se recupera de forma paulatina y pueden registrarse demoras en el recorrido, debido a restricciones de velocidad en el tramo".
Graves daños sufridos en la infraestructura
Tan solo una hora antes del comunicado de reapertura, a las 8:04, la empresa había informado de que "los graves daños sufridos en la infraestructura, derivados del temporal del pasado 29 de octubre, no han podido ser solventados para reanudar la circulación ferroviaria en condiciones óptimas de seguridad".
También informaba que los trayectos de Larga Distancia entre Cádiz y Sevilla se realizarán en autobús en ambos sentidos. En Media Distancia, se habilita un tren lanzadera en el tramo Lebrija-Sevilla, reforzado con un servicio adicional de autobuses. Por su parte, el Cercanías de Sevilla mantiene interrumpido el servicio entre Jardines de Hércules y Lebrija, en la línea C1.
Las lluvias torrenciales y el viento de gran intensidad habían afectado principalmente al tendido eléctrico, las vías y sistemas de señalización, lo que obligó a suspender las operaciones hasta garantizar las condiciones de seguridad necesarias. Renfe ha agradecido la colaboración de los equipos técnicos y de los viajeros durante los días de incidencia, subrayando la prioridad de actuar con “la máxima seguridad operativa”.
