La Guardia Civil ha detenido en tiempo récord a los dos supuestos autores del tiroteo mortal en Carmona, que dejó un balance de dos fallecidos y un herido grave. Los arrestados, de 39 y 27 años, se encuentran ya en dependencias policiales acusados de dos homicidios dolosos y otro en grado de tentativa.
El violento suceso se produjo en la tarde del sábado en el interior de una finca con un bar, cuando la Central 062 de la Guardia Civil recibió una llamada alertando de disparos en la zona. Al llegar las patrullas, los agentes encontraron un escenario estremecedor: un hombre sin vida en el exterior del local, otro cadáver tras la barra, y un herido grave que yacía en una de las calles de acceso a la finca.
El herido tuvo que ser evacuado de urgencia en helicóptero hasta un hospital debido a la gravedad de las lesiones por arma de fuego.
Las primeras pesquisas apuntan a que los presuntos autores llegaron al lugar en un turismo, dirigiéndose directamente al propietario del bar antes de abrir fuego. Según los investigadores, el ataque podría estar relacionado con enfrentamientos previos entre las partes implicadas.
Tras huir a Sevilla capital, los sospechosos fueron localizados en un dispositivo coordinado. Uno de ellos, de 39 años, intentó escapar de forma rocambolesca: trató de descolgarse por la ventana con unas sábanas al detectar la presencia policial. No lo logró. Fue interceptado y detenido. Una hora después, caía el segundo implicado, de 27 años.
La Unidad Orgánica de Policía Judicial de Sevilla continúa recabando pruebas y ha practicado varias entradas y registros domiciliarios. La investigación sigue abierta para esclarecer todos los detalles del crimen.
Los detenidos permanecerán en la Comandancia de Sevilla hasta ser puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Carmona. La Guardia Civil ha destacado que la rápida actuación permitió en menos de 24 horas no solo identificar y localizar a los sospechosos, sino también detenerlos.