El futuro del Benito Villamarín no contenta a colectivos importantes en Sevilla. Tras la aprobación en el pleno municipal este 18 de septiembre del Estudio de Ordenación de la parcela, Ecologistas en Acción y varias asociaciones vecinales han anunciado que emprenderán una nueva vía judicial. Los colectivos consideran que el proyecto “no supone una mejora urbana” y que “lesiona el interés público”, al tiempo que arrastra “numerosas irregularidades” que, en su opinión, acabarán provocando su paralización.
La aprobación salió adelante con los votos de PP, PSOE y Vox, mientras que el grupo IU-Podemos se opuso frontalmente. La iniciativa afecta tanto al suelo donde hoy se asienta el estadio como a terrenos municipales colindantes y parte de un viario público de la Avenida de la Palmera.
Ecologistas en Acción, respaldada por asociaciones como Asociación Parque Vivo del Guadaira, AVV Puerto de Sevilla, AVV Los Andes de Heliopolis, AVV Foro de Heliopolis, AVV Bermejales Activa, AVV Pedro Salvador, AVV de Reina Mercedes, A VV Siete Calles y Asociación Urban Century, denuncian defectos graves en el expediente. Incluso recuerdan que el propio Secretario Municipal dejó constancia de reparos —aunque no vinculantes— sobre la indefinición de usos y cuestiones procedimentales. Un documento, igualmente, cuestionado por aficionados béticos toda vez que hablan de vinculaciones del citado funcionario con el Sevilla FC.
No es la primera vez que acuden a los tribunales. En junio, interpusieron una demanda contra la modificación del PGOU 63, admitida por el Tribunal Superior de Andalucía, alegando que dicha alteración carecía de motivación y encubría “una subvención prohibida por la legislación europea”.
Ahora, en un plazo de dos meses desde la publicación en el BOP, volverán a impugnar el Estudio de Ordenación. Argumentan que el proyecto tiene un fin “puramente lucrativo”, afecta negativamente a la calidad de vida de los barrios cercanos y supone un “mamotreto de usos terciarios sobre suelo público”.Igualmente insistirán en "las irregularidades administrativas detectadas: la ocupación de un viario público que no está inmatriculado, las notables carencias de un estudio de ordenación que no define usos, la pertinencia de que esta figura sea la adecuada para regularizar un edificio que se encuentra fuera de ordenación y otras evidenciadas en el Informe del Secretario Municipal".
Asimismo, Ecologistas en Acción ha pedido la personación en el trámite de la licencia, momento en el que previsiblemente solicitará "medidas cautelares y la paralización del inicio de obra si entiende que el proyecto -como así parece- afecta a la seguridad de los asistentes de los usos que se pretenden implantar". Para Ecologistas en Acción esta operación es un claro ejemplo de “neofeudalismo urbanístico” o de urbanismo a la carta, en el que todos los medios de la administración se ponen a disposición de un promotor, justificado en un discutido interés público, y se sortean todos los posibles obstáculos, aún incurriendo de manera flagrante en numerosas irregularidades.