Las fachadas neoclásicas y neorrenacentistas del Ayuntamiento de Sevilla preparadas para su restauración

El equipo encargado de estos trabajos ha empezado a colocar los andamios en el frontispicio orientado a la Plaza Nueva con la finalidad de acometer la intervención en el tramo más próximo a la avenida de la Constitución

Fachada de la plaza San Francisco del Ayuntamiento de Sevilla.

El equipo encargado de la resturación de las fachadas neoclásicas y neorrenacentistas de la Casa Consistorial de Sevilla ha comenzado este viernes el montaje de andamios en el frontispicio orientado a la Plaza Nueva con la finalidad de acometer, en breve, la intervención en el tramo más próximo a la avenida de la Constitución.

Esta fase del proyecto de restauración se inició en la zona de la fachada del Ayuntamiento próxima al Arquillo a mediados del pasado mes de febrero y las labores de rehabilitación ya han culminado. En su conjunto, la inversión prevista es de 1,7 millones de euros y su plazo de ejecución de 36 meses.

Los trabajos consistirán, básicamente, en reparaciones estructurales, limpieza, consolidación, protección e impermeabilización de las cornisas. Ambas fachadas presentan los lógicos problemas en la piedra que acarrea el paso del tiempo y los gases contaminantes –costras, verdinas, hongos y microhongos–.

En concreto, el proyecto actual contempla la restauración de los tramos 7, 8, 9, 10 y 11 y tres muros exteriores de la Sala Capitular y de las fachadas neoclásicas de la Casa Consistorial, continuando las fases anteriores realizadas en las fachadas renacentistas y las del siglo XIX.

Por un lado, se prevé la restauración de fachadas norte (tramos 7 y 9), este (tramo 8), oeste (tramo 10) y sur (tramo 11), con limpieza de la piedra, de sales, costras y materiales extraños nocivos, llagueado de las juntas de unión de la sillería, refuerzos estructurales de elementos pétreos, así como la sustitución de balaustres fracturados y de hormigón si es necesario.

El proyecto contempla también la impermeabilización de cornisas, gárgolas y demás zonas afectadas por la humedad, sustitución de sillares que estén deteriorados en los zócalos y la aplicación de una barrera anticapilaridad, sustitución de sillares deteriorados en la fábrica de las fachadas, consolidación y protección de la piedra de las fábricas, y la limpieza y protección de las carpinterías de ventanas.

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