Curro Romero, el torero de 91 años, sigue ingresado en el hospital Virgen de Macarena de Sevilla tras presentar malestar y fiebres altas. Las pruebas médicas determinaron que había dado positivo por coronavirus, aunque su estado ha mejorado y ha sido trasladado a planta, según confirmaron fuentes cercanas al centro sanitario.
Su esposa, Carmen Tello, ha indicado a la revista Semana que el diestro se encuentra en evolución favorable y que los médicos destacan su fortaleza frente a un cuadro de Covid-19 que incluyó fiebres muy altas y complicaciones pulmonares. Tello ha destacado que la administración de medicamentos ha contribuido a su mejoría y que el traslado a planta permite continuar el tratamiento por vía oral.
Horas antes, Carmen Tello ha detallado cómo se produjo la recaída de Romero. También ha señalado que el torero presentó fiebre de forma progresiva desde el martes, y que el domingo por la noche sufrió un pico de temperatura asociado a una neumonía, una de las complicaciones derivadas de la infección. Durante su estancia en observación, la esposa pudo visitarlo dos veces al día, mientras permanecía aislado.
Varios problemas de salud
El ingreso actual se suma a varios problemas de salud que ha sufrido el torero en los últimos meses. En mayo pasado, Romero fue hospitalizado en el mismo centro en dos ocasiones por un proceso infeccioso y una bajada de tensión. Tras recibir tratamiento, fue dado de alta el 6 de mayo y regresó a su hogar acompañado por su esposa.
Sin embargo, el 10 de mayo tuvo que volver al hospital debido a una fuerte crisis respiratoria. Después de recuperarse, pudo abandonar nuevamente el centro médico para continuar su recuperación en casa, siempre rodeado de su entorno más cercano y con el apoyo constante de Carmen Tello.