La noche de este miércoles en Lebrija estuvo a punto de convertirse en una de esas páginas eternas de la Copa del Rey. El Atlético Antoniano, conjunto de Segunda RFEF, llevó al límite a un Villarreal de competición europea que solo pudo sobrevivir desde el punto de penalti. El duelo, emocionante y áspero, terminó 1-1 tras una prórroga que dejó al público del Municipal completamente en pie antes de que los amarillos certificaran su pase a dieciseisavos gracias a la tanda.
Durante los 90 minutos reglamentarios nadie logró romper el 0-0, un marcador que reflejaba tanto la férrea resistencia del Antoniano como la evidente incomodidad de los futbolistas de Primera sobre el césped sintético. Los visitantes apenas generaron peligro en la primera media hora, más allá de un par de remates imprecisos de Hugo López y Rafa Marín en saques de esquina. El canterano incluso reclamó un penalti por mano de Antonio en el minuto 22, poco antes de que este tuviera que abandonar el campo lesionado.
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— RFEF (@rfef) December 4, 2025
🆚 @CAAntoniano | 1(3)-(5)1 | @VillarrealCF
⚽ 0-1 | Ayoze Pérez (102')
⚽ 1-1 | Jesús García (109') #LaCopaMola | Segunda Eliminatoria pic.twitter.com/o3386UDhKY
El conjunto local también tuvo su momento: un disparo lejano desviado por Peral dentro del área casi sorprende a Arnau Tenas, que reaccionó a tiempo para evitar un susto mayor. Antes del descanso, el Villarreal trató de apretar. Pepé probó con un tiro de media distancia que Matías Árbol detuvo con seguridad, y Oluwaseyi cerró la primera mitad con otra ocasión clara.
El escenario no cambió demasiado tras el descanso, aunque Solomon pudo abrir la lata en el 48 con un remate que Matías abortó. Sin embargo, el choque volvió pronto a un ritmo espeso, y ni siquiera el dominio visitante parecía romper la resistencia del Antoniano. Las entradas de Mikautadze y Ayoze aliviaron al Villarreal, que dispuso de dos oportunidades muy claras para evitar la prórroga, ambas en botas de Oluwaseyi. En la primera, Revuelta salvó sobre la línea, y en la segunda el canadiense rozó el poste.
Ya en la prórroga, Lebrija vibró con un tiro de José Pedraza, que se medía a su tío Alfonso y estuvo cerca de sorprender a Arnau en el minuto 100. El sueño local se tambaleó dos minutos después: un córner ejecutado con precisión quirúrgica por Dani Parejo encontró la cabeza de Ayoze, que firmó el 0-1.
💛 El @VillarrealCF, último clasificado del miércoles.
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Pero el Antoniano no había dicho su última palabra. En el descanso del tiempo extra, Lolo Rosano pidió a los suyos subir líneas. La orden surtió efecto de inmediato: un robo en el círculo central permitió a Pana atreverse con un derechazo desde 30 metros que estremeció la cruceta. El rechace cayó a los pies de Jesús García, que remató de cabeza para el 1-1 y desató la euforia en la grada.
La tanda de penaltis decidió lo que el fútbol había mantenido igualado. Los cinco lanzadores visitantes marcaron. En el lado local, Durán vio cómo Arnau detenía su lanzamiento, única diferencia de una serie que terminó 3-5. El Municipal, lleno con 3.500 espectadores, despidió a su Antoniano con la ovación que se dedica a los equipos que compiten de tú a tú con quien, sobre el papel, debería arrasar. Y anoche, en Lebrija, nada estuvo tan lejos del guion previsto.


