La Guardia Civil ha desmantelado, en colaboración con la Gendarmería marroquí, una organización especializada en el tráfico de hachís mediante drones artesanales. La investigación ha determinado que el grupo ha podido introducir hasta 200 kilos de droga en España durante una sola noche, utilizando aeronaves no tripuladas construidas por los propios integrantes.
La Guardia Civil ha informado de que los drones despegaban cada día desde la localidad gaditana de Alcalá de los Gazules en las primeras horas de la madrugada, aprovechando las condiciones de viento favorables. Los aparatos han atravesado el Estrecho de Gibraltar transportando la droga y han liberado la carga en vuelo sobre municipios como Vejer de la Frontera o Tarifa.
Las pesquisas han constatado que, en jornadas con viento débil, la organización ha mantenido hasta diez drones activos simultáneamente, multiplicando así su capacidad de tráfico y alcanzando los 200 kilos de hachís en una sola noche.
La investigación ha revelado la sofisticación del método empleado, que ha combinado el ensamblaje propio de drones con la sincronización de vuelos nocturnos. La colaboración internacional entre España y Marruecos ha sido clave para la detección y neutralización de la red, reflejando un esfuerzo conjunto frente a nuevas formas de contrabando de estupefacientes.
Además, a los paquetes liberados se les adherían luminosos fluorescentes y un sistema de geolocalización enlazado por radiofrecuencia a un mando que emitía señales sonoras cuando se encontraba en las proximidades. Debido a la escasa visibilidad de madrugada, los encargados de la recogida de la droga hacían uso de un visor nocturno con el que podían detectar con mayor facilidad el luminoso fluorescente colocado en los paquetes.
Una vez recogida la droga, era trasladada a casas rurales alquiladas, empleadas como guarderías temporales para evitar sospechas y asegurar la distribución posterior.
Por su parte, tras soltar la carga, los drones continuaban en su vuelo hasta alcanzar el punto de aterrizaje de nuevo en Alcalá, donde eran recuperados por otros miembros de la organización apostados en la zona.
Otras operaciones esta semana
Esta misma semana la Guardia Civil de Cádiz detuvo a tres personas en Barbate durante un operativo nocturno en el que se desmanteló una instalación utilizada para el almacenamiento de combustible destinado al abastecimiento de narcolanchas. En el lugar se localizaron 200 garrafas de gasolina, dos motores fueraborda y una embarcación desmontable. La operación contó con la participación de casi treinta agentes de la Comandancia de Cádiz y los detenidos están acusados de delitos de contrabando y tenencia de sustancias inflamables.
Desde el pasado fin de semana, la Guardia Civil ha incautado un total de 590 garrafas de gasolina, que suman más de 16.000 litros de combustible, así como cinco embarcaciones empleadas en la logística del narcotráfico. Los dispositivos, desarrollados por tierra, mar y aire en distintos puntos de la provincia, forman parte de las acciones policiales dirigidas a combatir el tráfico de drogas y el contrabando de sustancias prohibidas por vía marítima.
