Arcos de la Frontera se prepara para vivir una de sus noches más especiales. El próximo sábado 23 de agosto, desde las 21:30 hasta la 1:30 horas de la madrugada, el casco histórico se transformará en un escenario único gracias a la celebración de Cal, Piedra y Velas - La Ciudad de la Luz 2025.
Esta cita vuelve al municipio gaditano, que, año tras año, convierte las calles más emblemáticas en un recorrido mágico bajo la luz de 15.000 velas. Se suma así a otras localidades como Vejer o Jerez, en un evento que reúne a miles de personas para ver las ciudades bajo la íntima y tenue luz del fuego en el pabilo.
Música en directo
Durante la noche, distintos enclaves del recorrido se llenarán de música en directo. El violín de Ana Carrasco y Ayelén Ramos resonará en el atrio de Santa María, mientras que en la Plaza Boticas sonarán el saxo y el oboe de José Miguel Alvarado. El atrio de San Pedro acogerá un conjunto de violonchelos, y el Palacio del Mayorazgo será escenario del arpa de Tibor Tejada del Río. También habrá lugar para sonidos más contemporáneos, como el handpan de Javier Prieto en el Rincón de las Nieves.
La culminación de la velada tendrá lugar a las 23:00 horas en la Plaza del Cabildo, donde se celebrará Corazón de Tierra, un espectáculo de fuego, danza, malabares y teatro que reunirá a artistas de primer nivel. Todo ello con el apoyo de la Diputación de Cádiz y la implicación de hermandades, asociaciones, campaneros, vecinos y vecinas, además de la colaboración de Iberdrola, el Conservatorio de Música y el equipo de la Delegación de Cultura.
Recorrido del camino de velas
El itinerario parte desde la Plaza del Murete y atraviesa lugares tan reconocidos como el Atrio de Santa María, la calle Dean Espinosa, Boticas, Maldonado o la Plaza del Cabildo, invita a vecinos y visitantes a sumergirse en una experiencia en la que la música, el arte y la emoción se entrelazan con la propia belleza del entorno.
La atmósfera, marcada por la tenue iluminación de las velas, convierte cada rincón en un espacio de contemplación y disfrute colectivo, en una noche que promete quedar grabada en la memoria colectiva de quienes la vivan.