La Sierra de Cádiz se ha levantado con una noticia triste tras el fallecimiento de Antonio Jarillo Tornay, ganadero de Grazalema que impulsó el proyecto asociativo y de trabajo para conservar la cabra payoya.
Desde la Asociación de Criadores de la Raza Caprina Payoya, que Jarillo fundó junto a otros ganaderos el 20 de junio del año 1995, han lamentado la muerte del que fuera primer presidente de la referida asociación.
"Antonio Jarillo fue el impulsor de este proyecto asociativo y del trabajo de conservación de esta raza autóctona en peligro de extinción: fue clave en el proyecto, ya que se encargó de hablar con los ganaderos de la comarca de Grazalema para crear el grupo. No solo se dedicó a la cabra payoya, también fue un firme defensor de los proyectos de asociación y cooperativos, prueba de ello son los años que desempeñó su labor como presidente de la Asociación de Ganaderos de Grazalema", han destacado desde la asociación.
El grupo de ganaderas y ganaderos que la componen quieren rendir homenaje a la figura de Antonio agradeciendo "la inmensa labor que ha hecho y el apoyo incondicional por nuestra raza y equipo. También queremos recordar todo el trabajo realizado por el sector ganadero de la Sierra de Cádiz. Antonio era un hombre de valores: de pocas palabras, pero cuando hablaba todo el mundo le escuchaba y le respetaba. Gracias por tanto, nunca te olvidaremos".
