El último balance de Ecologistas en Acción sobre las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDARs) en el Parque Natural Sierra de Grazalema ha dejado un panorama preocupante. Según el informe remitido a la junta rectora del parque, el funcionamiento de estas infraestructuras es muy desigual y en algunos municipios ni siquiera existen o están fuera de servicio.
Entre los casos más graves se encuentran Benaocaz, que carece de depuradora y no tiene proyecto en marcha, y localidades malagueñas como Montecorto, Montejaque, Benaoján o Cortes de la Frontera, donde la situación es similar. “El parque natural debe ser un ejemplo de buena gestión, pero no se está cumpliendo”, advierte la organización.
Para medir la eficiencia, se han analizado parámetros clave como la Demanda Biológica de Oxígeno (DBO5), la Demanda Química de Oxígeno (DQO) y los sólidos en suspensión. En el caso de la EDAR de Ubrique, también se ha incluido el control del nitrógeno (N) y el fósforo (P), ya que vierte al pantano de Los Hurones, un área sensible destinada al abastecimiento urbano.
Disparidad en las EDAR
En el lado positivo, las depuradoras de El Gastor, Prado del Rey, Zahara de la Sierra y Ronda destacan por un excelente rendimiento, con Prado del Rey como la mejor valorada. También presentan resultados aceptables las de Algodonales y El Bosque, aunque con margen de mejora.
Sin embargo, el informe es demoledor con las EDARs de Grazalema, Ubrique y Villaluenga del Rosario. La de Grazalema “es la que peor funciona”, llegando a duplicar los límites legales de contaminación en numerosas muestras y sin alcanzar ni la mitad de los porcentajes mínimos exigidos. Ubrique incumple de forma sistemática en todos los parámetros, con niveles de nitrógeno y fósforo que amenazan con provocar eutrofización en el río que desemboca en Los Hurones. En Villaluenga, los datos muestran graves picos de contaminación, posiblemente vinculados a vertidos de las queserías locales.
Mientras tanto, otros municipios se encuentran a medio camino: Jimera de Líbar apenas estrena su depuradora este año y aún no hay datos de rendimiento; en Benamahoma solo existe una muestra analizada, insuficiente para valorar su eficacia. En Benaoján-Montejaque, tras el rechazo social a la ubicación inicial, el Ministerio ha sacado a licitación un nuevo proyecto.
La organización ecologista exige que el Parque Natural Sierra de Grazalema adopte una actitud más firme para garantizar que todos los municipios dispongan de una depuradora operativa y eficiente. Denuncian además que la Consejería de Sostenibilidad ni siquiera incluye en las memorias anuales información sobre el funcionamiento de estas instalaciones, pese a que Ecologistas en Acción la facilita.
“Un espacio natural protegido no puede permitir vertidos que conviertan sus ríos en aguas putrefactas sin oxígeno”, concluye el informe, en el que se reclama una actuación inmediata para revertir una situación que califican de alarmante.
A continuación, el informe de Ecologistas en Acción.
