A sus 47 años, Pedro Carrión continúa desafiando los límites de la edad en el CD San Fernando 1940, en un proyecto al que llega cargado de experiencia y goles, pero también con la misma pasión de siempre. Como él mismo reconoce, "yo nunca me llegué a desvincular del fútbol", y aunque había decidido retirarse, la llamada de un amigo y compañero de su etapa de entrenador le hizo volver a calzarse las botas unos mesas atrás y demostrar que la edad es solo un número.
Carrión explica cómo ha mantenido siempre su vínculo con el deporte, incluso durante su etapa en los banquillos: "Siempre está haciendo cosas. Incluso cuando he estado en mi etapa de entrenador, en los entrenamientos también he aprovechado y me he metido en todos los ejercicios, todos los entrenamientos que podía. Intentando mantenernos, ya por salud también, no dejar de hacer cosas".

El regreso a los terrenos de juego no fue casual: "El año pasado, un amigo mío y un compañero del curso de entrenador de aquí de San Fernando, Jesús Pecci, llevaba la Roteña y me pidió que le echara una mano, porque él se quedó sin jugadores, sin delantero Me dijo que necesitaba un futbolista, que él sabía que yo al menos me iba a mantener en forma". Eso fue el paso previo a la gran aventura con el equipo isleño.
A pesar de los años, Pedro confiesa sentirse sorprendido por su propio rendimiento: "Después de hacer la pretemporada, la verdad que ha sido bastante exigente... La exigencia del proyecto y de la ilusión que se ha creado alrededor de este nuevo proyecto con Monchi me ha obligado a ponerme lo mejor físicamente que pudiera. La exigencia también la tiene uno mismo cuando no estaba prácticamente jugando en ningún equipo".
Pedro Carrión describe con detalle cómo se siente dentro del campo, lejos de los números y los resultados: "Me siento bien después de hacer la pretemporada, la verdad que ha sido bastante exigente... Pero todo esto me ha ayudado para estar mejor todavía. Salía, por ejemplo, a correr y hacía mis 10-12 kilómetros". Reconoce que la edad marca diferencias en la recuperación respecto a los más jóvenes, pero su entrega sigue siendo total: "El tema donde noto la edad puede ser en la recuperación; la regeneración celular de los chavales no es la misma que tengo yo. Pero dentro del campo me quiero poner a la altura de los chavales y aguanto lo que haga falta".

Cada partido es también una oportunidad para compartir su pasión con su hija: "El poder enseñarle las tardes de gloria que hemos vivido en Bahía Sur me encanta. Me parece que estoy viviendo un déjà vu aquí ahora mismo en San Fernando. Y cuando salto al Bahía Sur y viene toda aquella etapa, estamos haciendo también fútbol bastante atractivo. Es algo maravilloso, algo precioso".
Para el delantero malagueño, esta etapa es un verdadero regalo y no se plantea qué hará cuando acabe la temporada: "Quiero Ir año a año, disfrutar del camino. Estoy disfrutando muchísimo y quiero aprovechar este regalo que me da la vida".
La longevidad en el mundo del fútbol
El atacante reflexiona sobre la longevidad de los futbolistas y cómo los tiempos han cambiado: "Zé Roberto, ese brasileño, se retiró a los 46. Hoy en día los jugadores hacen o hemos hecho mejor nivel de vida y han aguantado más. Eso de retirarse a los 30 ó 31 está bastante lejos ahora. Es donde más experiencia tiene el futbolista y donde mejor se puede encontrar, sobre todo de resistencia. Últimamente los Ronaldo, los Sergio Ramos, los Messi, Modric, todos aguantando… No tienes la velocidad de antes, pero sí puedes demostrar tu experiencia y tu sabiduría en la colocación".
El delantero mantiene su filosofía de juego basada en la experiencia y la acumulación de ocasiones. Un delantero que se aprovecha también de la calidad de sus compañeros: "Aprendes que el fútbol al final es probabilidades. Lo importante es acumular ocasiones. Yo siempre decía que Cristiano Ronaldo es el que más goles metía porque al final es el que más ocasiones acumulaba. Tiene una ambición y una exigencia máxima que lo que quiere es insistir".



