Una vivienda antigua de planta baja situada en la calle San Vicente, en el municipio de San Fernando, sufrió en la mañana del domingo un desprendimiento parcial de su forjado. El incidente, que no provocó heridos, obligó a la intervención del Consorcio Provincial de Bomberos de Cádiz, tras ser requerido por la Policía Local alrededor de las 10:00 horas.
Una dotación del parque de bomberos de San Fernando se desplazó hasta el lugar para realizar una inspección técnica del inmueble. Una vez evaluada la estructura, los bomberos detectaron en dos estancias signos claros de deterioro en la capacidad portante del forjado, lo que suponía un riesgo evidente para la integridad del edificio y la seguridad de su único ocupante.
Un anciano desalojado
La vivienda estaba habitada por un varón de avanzada edad. Ante la situación de inestabilidad del inmueble, los servicios de emergencia recomendaron su reubicación inmediata como medida preventiva. Los bomberos colaboraron con el afectado en la recogida de enseres personales, documentación, medicamentos y objetos de primera necesidad para facilitar su traslado a la vivienda de un familiar.
Con el objetivo de garantizar la estabilidad estructural y evitar nuevos desprendimientos, los efectivos del Consorcio procedieron al apuntalamiento de la estancia en la que se produjo el colapso parcial. Asimismo, toda la vivienda fue precintada por razones de seguridad y para impedir el acceso hasta nueva revisión técnica.
Los bomberos también emitieron un informe técnico dirigido al área municipal de Urbanismo, con el fin de que los servicios correspondientes valoren las condiciones del edificio y determinen las actuaciones necesarias para su reparación o posible demolición.
Durante la intervención se emplearon tres vehículos: una autobomba urbana ligera (P-40), una autobomba urbana pesada (U-36) y un vehículo de mando (M-45). El dispositivo estuvo integrado por cinco efectivos del parque de San Fernando, que desarrollaron la operación sin incidencias destacables.