¿Por qué en San Fernando hace más calor que en Cádiz... incluso cuando ambas están bajo el mismo sol y apenas les separa unos centenares de metros de distancia? Es la pregunta que lanzba en redes la cuenta dedicada a la difusión de contenidos meteorológicos @meteocadiz.
Y la respuesta está, curiosamente, en el viento, ese factor invisible pero decisivo que puede disparar los termómetros en cuestión de minutos. El pasado martes se vivió un ejemplo claro: mientras en Cádiz se alcanzaban unos moderados 31,4 °C, en San Fernando el mercurio rozaba los 39,8 °C.
Aunque están separadas por apenas unos kilómetros, el calor no se reparte igual. En San Fernando, cuando sopla viento del sureste (SE), este llega recalentado desde tierra firme, cargado de temperaturas extremas. Eso hace que la ciudad reciba un aporte casi total de calor terrestre. Cádiz, sin embargo, cuenta con un aliado: el mar.
La diferencia, menor con el levante
El efecto regulador de la bahía marca la diferencia. Aunque ambos municipios se ven afectados por el mismo flujo de aire, en Cádiz el viento viene con una carga térmica más atenuada. Esa brisa marina más fresca consigue suavizar la temperatura, aunque sea ligeramente. Una especie de escudo climático que amortigua las embestidas del calor.
Cuando sopla el levante, la diferencia de temperaturas es menor, explican desde la cuenta de X (antes Twitter) @meteocadiz, que acostumbra a compartir fenómenos curiosos y datos climáticos locales. Pero cuando el viento cambia y se alía con el calor continental, San Fernando sufre mucho más. La orientación y el tipo de viento pueden ser más determinantes que la propia radiación solar.
En resumen, la geografía y los vientos juegan un papel clave en este fenómeno tan llamativo. Aunque Cádiz y San Fernando parezcan gemelas al sol, el baile del calor lo marca el aire que las atraviesa. Y cuando el sureste aprieta, la diferencia puede superar los 8 grados... casi como estar en otro país.