Las familias de Residencial Las Gaviotas, en la calle Parra de El Puerto, están cansados de vivir entre prostitución y menudeo de drogas. Llevan años siendo testigos de escenas en una zona donde hay parcelas y solares abandonados desde hace años. Una vez más, la asociación de vecinos Jardín de Cano ha alzado la voz para denunciar la “dejadez y suciedad” a la que se enfrenta la comunidad diariamente.
En la zona residencial, muy cercana al colegio de La Salle, existe un solar de grandes dimensiones en el que las obras de nuevos edificios para viviendas se paralizaron cuando estalló la burbuja inmobiliaria. Desde entonces, en lugar de casas, se divisan montículos de arena y vegetación seca repleta de basura.
“No vienen a quitar los rastrojos y ahí se esconde de todo. Se forzó la puerta y hay drogas, personas que pernoctan con cartones y hacen sus necesidades”, manifiestan desde la asociación. Las familias se ven obligadas a presenciar cómo un proxeneta para su furgoneta y controla a las mujeres que merodean por el lugar.
Según cuentan a lavozdelsur.es, no solo ocurre por las noches sino también a plena luz del día y, en ocasiones, muy cerca de las ventanas de varios vecinos. “Algunas veces les hemos llamado la atención y nos han amenazado, es irritante. Hemos hecho de todo, incluso formamos la asociación para dirigirnos a las concejalías”, explican.
"Hay personas que pernoctan por la noche"
Sus quejas caen en saco roto y nadie les proporciona una solución que cada vez ven más lejana. Aunque llamen a la Policía, la zona continúa estando tomada por la prostitución y el tráfico de droga. “Hemos pedido al Ayuntamiento una mejor iluminación, limpieza y que cierre las parcelas. Pero nos dicen que no pueden desbrozar porque no tienen maquinaria. Nos saca de quicio”, manifiestan los residentes con indignación.
La asociación asegura que han comunicado la situación hasta la saciedad e incluso, algunas personas, han interpuesto sus demandas de forma individual para hacer presión. Además, lamenta la inacción del Ayuntamiento para poner fin a la degradación de la zona.
“Pagamos un IBI como si fuera una zona de lujo. No hay derecho a que los ciudadanos vivan así”, expresan. También recuerdan que “el Ayuntamiento es siempre responsable subsidiario de todos los solares del municipio aunque no sean suyos”. Por ello, reclaman el cuidado de las parcelas así como una solución que lleva años sin llegar.