Bomberos del Consorcio Provincial del parque de Los Barrios, con apoyo del parque de Algeciras, han intervenido en la intervención para el rescate de un total de 35 personas en la urbanización Benharas, a consecuencia de las inundaciones provocadas por las lluvias. Es una zona pegada a la autovía, junto al río Palmones, en la que cuando se desborda el río hace que sufran las consecuencias las viviendas cercanas de dicha urbanización, con un boquete de más de un metro de agua de profundidad.
Los bomberos recibieron aviso de la Policía Local. Era imposible acceder a la zona con camiones, por lo que se solicita colaboración en servicio al grupo subacuático de la Guardia Civil, accediendo y procediendo al rescate de las personas afectadas mediante una zodiac y retroexcavadora, recogiendo en la medida de lo posible a niños y personas mayores en primer lugar, ante el riesgo que ocasionaba. Se les llevaba junto al puente cercano a la salida de Los Barrios, donde estaba situada la ambulancia.
El efecto de la marea llena en las primeras horas del servicio también dificultó las tareas de rescate. En cuanto la marea comenzó a vaciar, la evacuación de agua era mucho mayor y más accesible el poder actuar en los rescates. Posteriormente, también se acude a la perrera de la localidad, normalmente también afectada cuando se producen este tipo de inundaciones, para rescatar a varias decenas de animales que podían estar en peligro. En la intervención, que dura nueve horas, colaboran con bomberos tanto Guardia Civil, como Policía Local y Nacional y servicios sanitarios.
40 incidencias en la provincia de Cádiz
La delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Cádiz, Ana Mestre, ha desactivado a las 19:00 horas de este domingo la fase de pre-emergencia del Plan ante el Riesgo de Inundaciones (PERI) en la provincia, una vez que ha finalizado el fenómeno meteorológico adverso, que ha mantenido en nivel naranja a la comarca del Estrecho.
El teléfono de Emergencias 112 ha gestionado casi 40 incidencias, todas localizados en la comarca del Estrecho. El municipio que ha concentrado el mayor volumen de avisos ha sido Los Barrios, donde se activó el Plan de Emergencias Municipal, que ya ha sido desactivado. El Teléfono 112 también ha coordinado avisos en Algeciras, Tarifa y San Roque, sobre todo por anegaciones en viviendas y por carreteras afectadas por el agua.
La incidencia más destacada ha tenido lugar en Los Barrios, donde los servicios de emergencia han tenido que rescatar a 55 personas, 36 en la zona de Benharas y 19 en las zona de la Estación, además de ocho perros. La evacuación ha sido realizada por embarcaciones del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, ya que el agua mantenía los accesos inhabilitados. Los servicios sanitarios han atendido a tres personas por hipotermia, entre ellas una nonagenaria que ha sido trasladada al centro de salud, aunque el resto no requirió evacuación hospitalaria. Las personas evacuadas han sido realojadas en casas de familiares.
Hasta seis carreteras se han visto afectadas por el fenómeno meteorológico adverso, aunque actualmente todas están ya abiertas al tráfico, según la información de la Dirección General de Tráfico. Las carreteras que se han visto afectadas han sido la CA-9208, en Algeciras; la CA-9210 en Tarifa; la CA-9209 en Los Barrios; la A-2100, la A-2102 y la A-2103, localizadas en San Roque. El cierre de estas dos últimas vías, afectadas por el desbordamiento del río Guadiaro, dejaron incomunicadas a varias urbanizaciones de Sotogrande.
La fase de pre-emergencia se identifica con la existencia de informaciones hidrológicas y meteorológicas que, por su evolución desfavorable, pudiesen dar lugar a inundaciones. Esta caracterización deriva, fundamentalmente, de la información aportada por los sistemas de información de meteorología adversa, la información pluviohidrológica y la información del estado de presas.
La Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior activó el Grupo de Seguimiento de Fenómenos Meteorológicos Adversos para garantizar en todo momento una pronta respuesta ante cualquier posible aumento de llamadas derivado del episodio meteorológico. De esta forma, todos los mecanismos humanos y materiales quedaron dispuestos para optimizar la gestión y coordinación de la emergencia por lluvia.
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