La Guardia Civil ha iniciado una investigación sobre un conductor tras circular durante más de treinta kilómetros en sentido contrario por la autovía A-4, en dirección a Cádiz. Los hechos se produjeron en la madrugada del pasado 30 de octubre, cuando varios usuarios alertaron a las autoridades sobre la presencia del vehículo circulando por los carriles destinados al tráfico en sentido Sevilla, a la altura del kilómetro 666.
La Unidad de Investigación de Seguridad Vial (UNIS) de la Guardia Civil intervino tras recibir las alertas y procedió a la detención del conductor. El hombre enfrenta cargos por dos presuntos delitos contra la seguridad vial: conducir con temeridad manifiesta, poniendo en riesgo la vida de otros usuarios, y hacerlo bajo la influencia del alcohol, según lo establecido en los artículos 380 y 379 del Código Penal. Estas conductas están castigadas con penas de prisión de seis meses a dos años y con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por un periodo de uno a seis años.
Más de 30 kilómetros
La investigación señala que la circulación en sentido contrario se prolongó durante treinta y un kilómetros, lo que elevó el riesgo de colisiones graves. Las autoridades subrayan la gravedad de este tipo de incidentes, que no solo comprometen la seguridad de los ocupantes del vehículo implicado, sino también la de todos los usuarios de la vía.
Tras completar la instrucción de las diligencias policiales, el caso fue remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Guardia de Puerto Real, en Cádiz, para la tramitación judicial correspondiente. La Guardia Civil continúa evaluando los detalles del incidente y su posible implicación en otras infracciones de tráfico relacionadas.