La Guardia Civil ha intervenido en una batida de caza celebrada en un coto de Vejer tras detectar múltiples irregularidades en la gestión de la actividad cinegética. Durante la operación se constató que se habían abatido una veintena de ciervos machos cuando la autorización vigente únicamente permitía la caza de hembras para fines de control poblacional.
La actuación se enmarca en los servicios de prevención del furtivismo y de supervisión de la caza que realiza la Unidad de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de Cádiz. Los agentes llevan a cabo inspecciones en monterías, ganchos y batidas que requieren autorización previa, con el objetivo de garantizar el cumplimiento de la normativa vigente y proteger el equilibrio ecológico de las especies.
La inspección se realizó durante una denominada “batida de gestión”, una modalidad destinada específicamente al control de cérvidos en la que únicamente se permite la caza de hembras. Esta medida busca regular la población y mantener la estabilidad del ecosistema del coto, evitando impactos negativos sobre la estructura genética y el comportamiento de la especie.
Varias infracciones
Al acudir al punto habilitado para el control veterinario de las piezas abatidas, los agentes constataron la presencia de un número elevado de ciervos machos, algunos con trofeos de relevancia. Esta situación evidenció el incumplimiento de las condiciones establecidas en la autorización emitida por la Junta de Andalucía y motivó la intervención de la Guardia Civil.
Como consecuencia de la inspección, el Seprona intervino un total de veinte ciervos machos (Cervus elaphus), que fueron retirados por una empresa autorizada para la gestión de subproductos animales y posteriormente destinados a su destrucción conforme a la normativa SANDACH. La Guardia Civil advirtió que la caza de machos en estas condiciones puede provocar desequilibrios en la población, empobrecimiento genético de la especie y alteraciones en su comportamiento, además de otros efectos ecológicos indirectos.
La Unidad levantó acta en el lugar de los hechos y notificó al organizador de la batida y al responsable del coto que las irregularidades serán puestas en conocimiento del departamento de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que podría incoar procedimientos por infracciones de la normativa autonómica de caza y sanidad animal.