"La mente juega malas pasadas". Así comienza la Policía Local de Chipiona a contar en sus redes sociales un caso con el que ha tenido que lidiar recientemente. Los agentes, en una actuación conjunta con la Guardia Civil, se desplazaron a un domicilio de esta localidad donde, al llegar, se encontraron una escena "nada agradable".
Había una persona armada y con las facultades mentales alteradas. Según explican, tuvieron en entrar con todo el material necesario para poder reducirla "en contra de su más absoluta voluntad". Finalmente, lograron controlarle y fue trasladado a un centro de internamiento de Salud Mental.
"Las enfermedades mentales alteran la realidad más absoluta y provoca situaciones peligrosas para el que la padece y sus familiares, que sufren tanto o más que el propio afectado", comenta la Policía Local, que desea "de corazón" que su internamiento "sea para bien y todos consigamos normalizar, respirar y vivir nuestro presente día a día".
Comentarios