El sacerdote José María Quintana Raigadas ha fallecido a los 78 años de edad y tras 54 años de ordenación sacerdotal. La noticia ha sido recibida con pesar tanto en la Archidiócesis de Burgos, a la que pertenecía, como en la Diócesis de Cádiz y Ceuta, donde desempeñó gran parte de su labor pastoral.
Quintana Raigadas desarrolló una extensa trayectoria sacerdotal que le llevó a servir en distintas parroquias a lo largo de su vida. Aunque nacido y formado en Burgos, ejerció buena parte de su ministerio en Andalucía, en parroquias como la de la Divina Pastora en Facinas, Santo Ángel Custodio en Bolonia, San Isidro Labrador en Tahivilla, Santa María del Saladillo en Algeciras y las de San Paulino y San José en Barbate.
Natural de Villaño de Losa, el padre José María se ordenó sacerdote en septiembre de 1971, tras completar su formación en el Seminario Diocesano de Burgos. Desde sus primeros años de ministerio combinó la atención pastoral con los estudios teológicos en la Facultad de Teología del Norte de España, en su sede burgalesa.
Su primer destino pastoral fue como encargado de Campillo de Bricia, Arreba y Población de Arreba. Poco después, en 1972, fue nombrado ecónomo de Hontoria de la Cantera y sirviente de las parroquias de Revillacruz, Tornadijo y Humienta. En 1977 asumió nuevas responsabilidades en el Condado de Valdivielso y otras localidades cercanas como El Almiñé, Santa Olalla de Valdivielso-Toba y Valdenoceda.
A partir de 1982 amplió su labor pastoral en Burgos haciéndose cargo también del servicio religioso en Quintana de Valdivielso, reforzando así su presencia en la zona norte de la provincia. Su vocación le llevó a aceptar, en 1994, un nuevo destino en la Diócesis de Cádiz y Ceuta, inicialmente por un periodo de tres años.
Tres décadas en el sur
Sin embargo, ese plazo fue prorrogándose sucesivamente, y durante casi tres décadas permaneció en el sur, volcado en las comunidades parroquiales gaditanas. No fue hasta 2022 cuando regresó a su tierra natal, donde recibió el nombramiento de capellán de los tanatorios de la ciudad de Burgos.
La capilla ardiente con sus restos mortales quedó instalada este martes, 13 de mayo, a partir de las 13.00 horas, en el tanatorio San José de Burgos. Será en ese mismo lugar donde se celebrará la misa de exequias, prevista para este miércoles 14 de mayo, a las 18.00 horas.
Con su fallecimiento se cierra una vida entregada por completo al servicio pastoral, repartida entre dos diócesis y caracterizada por su compromiso constante con las comunidades a las que sirvió. José María Quintana Raigadas deja un legado de cercanía, vocación y dedicación al sacerdocio.



