El registro como marca de una raspa de pescado, elemento gráfico habitual en la iconografía costera de Barbate, ha generado un conflicto entre comerciantes de Zahara de los Atunes y la actriz, humorista empresaria Paz Padilla. La polémica estalló cuando unos comerciantes locales recibieron un burofax por parte del despacho jurídico de la gaditana, instándoles a cesar el uso de determinados diseños gráficos por su similitud con el logotipo de la marca No Ni Ná.
El símbolo, presente desde hace años en camisetas, bolsos y artículos textiles, ha sido durante mucho tiempo parte del imaginario popular de la zona. Sin embargo, desde 2019, forma parte del registro de marca de Padilla, según se recoge en un comunicado oficial emitido por su equipo legal, donde se detalla que el diseño en cuestión "está protegido desde 2019 y es fundamental para su identidad comercial en Zahara de los Atunes”.
Paz Padilla responde: no hay apropiación del concepto de raspa
Desde el entorno de la actriz explican que el envío del burofax fue una medida para evitar confusiones entre consumidores, señalando que “se remitió un requerimiento formal por burofax solicitando el cese del uso de diseños similares, con el fin de evitar que el público se vea confundido”. A pesar de que se intentó una salida negociada, denuncian que lo que se ha producido es “una campaña pública basada en afirmaciones falsas y descontextualizadas”.
Padilla también ha querido desmentir que se haya presentado una demanda legal y matizó que “no se ha solicitado la retirada de todos los productos, solo el cese en el uso de ciertos diseños que podrían inducir a error al consumidor”. Además, aclaró que no se pretende una apropiación general del concepto de raspa, ya que “existen muchos diseños similares registrados y en el mercado”.
Su hija también se ha sumado a la aclaración pública
La hija de la humorista, Anna Ferrer, se ha sumado también a la aclaración pública a través de sus redes sociales, mensaje que luego fue compartido por la propia Padilla. "No pensé que hicieran falta, pero antes de que se cree más revuelo", apuntó Anna, explicando el origen del logotipo y la legalidad de su registro. También subrayó que “nuestro logo es una marca registrada” y forma parte del proceso legal que regula la propiedad intelectual.
Igualmente, precisó que el registro no afecta a todas las representaciones de raspas, sino únicamente a “nuestra raspa con nuestra forma”. Según explicó, se trata de un procedimiento que pasa por una revisión técnica para evitar que haya diseños demasiado similares dentro del mismo sector comercial. “Quien decide si un logo se parece o no es la Oficina de Registro de Marcas y Patentes”, añadió.