La Despensa Andaluza es mucho más que una tienda gourmet. Situada en una tranquila calle de Valdelagrana, en El Puerto, este espacio a medio camino entre tienda y bar de degustación ofrece una experiencia que mezcla sabor, proximidad y encanto local. Desde abril, Elisa Ransanz y Celia Martín, dos madrileñas con trayectoria en hostelería y hotelería, están al frente del negocio. Y lo tienen claro: aquí se viene a disfrutar con calma.
"Me vine a Valdelagrana por amor, y mi socia es mi cuñada; nuestros maridos son también socios del proyecto", cuenta Elisa con naturalidad. Con esa base familiar y una reforma ligera del local, las nuevas gestoras mantienen la esencia del establecimiento, fundado en 2021. Ambas han aportado toques propios: nuevos platps, una cuidada selección de tostas y especialidades como el jamón de mar, un producto gaditano muy demandado.

"Es de una conservera de Barbate y se elabora como si fuera jamón, pero con la ventresca del atún. Se cura y se corta finísimo. A la gente le encanta", explican. Junto a este manjar, también triunfan las tablas de quesos. "Tenemos muchos quesos de cabra payoya, todos de la zona", explican, así como una selección de conservas listas para servir, como cola de toro o carrilleras al whisky, que presentan acompañadas de puré parmentier.
No tienen cocina al uso. Todo lo que se sirve se prepara en frío. El cliente puede consumirlo allí mismo o bien llevárselo a casa. "Y también preparamos cestas para regalo, que en Navidad se venden mucho", señalan.

Un vergel en Valdelagrana
El local no está en primera línea de playa, y eso juega a su favor. "Muchos clientes dicen que somos como un oasis en Valdelagrana. Hay menos ruido, más tranquilidad, y eso les encanta". Aunque la clientela veraniega crece con turistas y propietarios de segunda residencia, La Despensa Andaluza cuenta con fieles todo el año. "Hay gente que viene antes de recoger a los niños del cole o los viernes a tomar algo. Es una clientela fija que se mantiene también en invierno".
Ambas tienen experiencia en el sector. Elisa estudió restauración y ha trabajado como cocinera en diversos restaurantes de Madrid e Ibiza. Celia viene del mundo hotelero: fue recepcionista en hoteles de Sevilla y Madrid, y trabajó en el Hard Rock Café. "Nos encanta esto. Estamos empezando, pero muy contentas. De momento estamos siendo prudentes con los productos, aunque ya hemos introducido novedades como el jamón de mar o el carpaccio de atún de la conservera Felisa de Barbate. Iremos viendo lo que funciona’, apuntan.
Aunque aún no han reactivado la tienda online que heredaron del anterior dueño, tienen previsto ponerla marcha más adelante. Por ahora, su mayor volumen de venta está en la degustación en el local, donde cada plato se convierte en una pequeña celebración del sabor andaluz.
El horario del establecimiento es hasta septiembre de 12.00 a 16.00 por la mañana y de 20.00 a 00.00 por la noche. Descansan el domingo y el lunes por la mañana para retomar la actividad el lunes en horario de tarde.



