El puerto de Algeciras carece de centro para tratar a los animales incautados por problemas de vacunación

Pacma denuncia irregularidades en el Puesto de Inspección Fronteriza y exige a la Autoridad Portuaria y al Ministerio de Agricultura que "proporcionen con inmediatez un lugar alternativo"

El Puesto de Inspección Fronterizo de Algeciras.

Pacma denuncia irregularidades en el Puerto de Algeciras y asegura que el Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) carece de centro de aislamiento y cuarentena para los animales incautados por problemas de vacunación.

Los animales que sean incautados sólo pueden retornar a Marruecos o ser sacrificados.

Desde hace tres meses, el PIF de Algeciras carece de lugar para albergar a los animales que lleguen sin las pruebas obligatorias de anticuerpos de rabia, a pesar de ser una opción obligatoria a ofrecer a las personas que se encuentren con esta problemática.

Según el Reglamento 576/2013, si un animal llega sin dichas pruebas tendrá tres opciones: regresar a Marruecos, ser sacrificado o quedar recluido en el PIF hasta pasar la cuarentena. Esta tercera opción es la más lógica y recurrida por los viajeros, pero actualmente no se puede optar a ello ya que el lugar donde se había estado hospedando a los animales afectados hasta ahora cerró debido a una denuncia por carencia de permisos.

El Partido Animalista ha denunciado este martes estas irregularidades, ya que asegura desconocer en este momento cuáles son las acciones que está llevando a cabo el PIF para paliar esta situación que, consideran, se ha extendido demasiado en el tiempo sin que parezca haber interés en solucionarla.

Eduardo Rovira, coordinador de Pacma en Cádiz y abogado, afirma que "la Administración está obligada a tener un lugar dónde albergar a los animales en todo momento" y exige a la Autoridad Portuaria y al Ministerio de Agricultura que "proporcione con inmediatez un lugar alternativo donde aislar al animal, bajo control oficial durante el tiempo necesario para que se ajuste a las condiciones establecidas en los capítulos II o III del Reglamento 576/2013, de modo que los viajeros opten por continuar eligiendo esta opción y así sus animales puedan ser salvados".

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