La Diputación de Cádiz ha presentado al Ayuntamiento de Arcos de la Frontera un anteproyecto que recoge tres alternativas para la creación de una senda ciclopeatonal paralela a la carretera provincial CA-5101, una vía muy transitada que conecta el municipio con Gibalbín. El documento fue entregado por el diputado de Cooperación, Javier Bello, al alcalde de Arcos, Miguel Rodríguez, tras un proceso de trabajo conjunto entre los equipos técnicos de ambas instituciones.
Tres propuestas y una alternativa de síntesis
En un principio, Diputación elaboró dos opciones de trazado, pero tras recibir sugerencias y aportaciones del Ayuntamiento, se ha desarrollado una tercera propuesta de síntesis, diseñada para ejecutarse por fases y con una estimación inicial de 2.018.471 euros. Bello destacó que el proyecto persigue tres objetivos fundamentales: “Más seguridad, comodidad y accesibilidad para una zona de Arcos donde se registra mucho movimiento de peatones y que demanda una actuación de este tipo”.
La actuación se centrará en el entorno de la barriada del Jadramil, una zona en la que confluyen viviendas, negocios y equipamientos como el Centro Hípico Curro Calderón o el Hotel El Tesorillo. La carretera provincial presenta un ancho variable —entre seis y siete metros— y carece de arcenes, lo que aumenta el riesgo para peatones y ciclistas.
Un recorrido de casi dos kilómetros
La futura senda tendrá una longitud total de 1.906 metros y pasará junto a 32 accesos a la carretera. Contará con un pavimento accesible, señalización horizontal y vertical, nueva iluminación y elementos de defensa para garantizar la seguridad de todos los usuarios, especialmente de las personas con movilidad reducida.
El estudio detalla que el trazado partirá desde la intersección de la avenida de Lebrija con la calle Cruz de las Carreras, en una zona urbana, y avanzará 240 metros hasta enlazar con el kilómetro cero de la CA-5101. En este tramo inicial, la senda comenzará por la margen izquierda, cruzará la carretera a los 100 metros y continuará por la derecha, separada de la calzada mediante un bordillo.
Posteriormente, se proyectan dos subtramos interurbanos: uno de 400 metros sobre el margen derecho, donde se rehabilitará el firme y se ampliará la carretera por la izquierda. Aquí se contempla además la mejora de la parada de autobús, con carril de detención y marquesina nueva, así como la reubicación de los contenedores de residuos.
El último segmento será el más extenso, con 1.266 metros de longitud, e incluirá un paso elevado para cruzar la CA-5101 y conectar con la glorieta de acceso a la A-382, desembocando finalmente en una vía pecuaria. Tanto este tramo como el anterior estarán delimitados por un pretil de hormigón, reforzando la seguridad frente al tráfico rodado.
