El sindicato provincial de Sanidad de CCOO ha denunciado una situación que considera “insostenible” en el paritorio del Hospital Universitario de Puerto Real. Según trasladó, profesionales, madres y recién nacidos llevan días expuestos a un frío extremo ante la imposibilidad de calefactar las zonas de dilatación y los paritorios.
La plantilla explicó al sindicato que el sistema de climatización es “antiguo y obsoleto”, y que su rendimiento se habría deteriorado aún más tras un pequeño incendio registrado hace unos días en la tercera planta del centro. Ese incidente activó las alarmas en la segunda planta de maternidad, pero no en el área de paritorio, donde desde entonces se habría pasado de un mal funcionamiento a una ausencia total de control de las temperaturas.
Trabajadores con varias capas de ropa
Los trabajadores aseguraron que en diversas estancias del paritorio las temperaturas se mantienen “muy por debajo de los niveles recomendados”, lo que estaría generando incomodidad, riesgos para la salud y dificultades para mantener el ritmo asistencial habitual. Las jornadas más frías y, especialmente, las noches obligan a matronas, enfermeras, auxiliares y médicos a trabajar con varias capas de ropa para soportar la situación.
Desde el sindicato subrayan que estas condiciones generan un entorno “inhóspito” tanto para el personal como para las pacientes, y recuerdan la especial vulnerabilidad de los recién nacidos a la hora de regular su temperatura corporal. Por ello, reclaman que se adopten medidas inmediatas para garantizar una atención en un “ambiente cálido y adecuado”, sin poner en riesgo la salud de los bebés.
CCOO considera “inadmisible” que un espacio tan crítico como un paritorio presente unas condiciones ambientales de este tipo. La organización, junto a los profesionales afectados, exige a la dirección del hospital que intervenga de manera urgente, revise el sistema de climatización y asegure que un problema similar no vuelva a repetirse.
El sindicato insiste en que la situación no puede prolongarse y reitera la necesidad de una respuesta rápida que permita restablecer el confort térmico en un servicio que consideran fundamental para la seguridad de madres, recién nacidos y personal sanitario.


