El río San Pedro a su paso por Puerto Real es uno de esos puntos donde se reúnen zona urbanizada y naturaleza. Las vistas en el entorno del Parque Natural Bahía de Cádiz son de una enorme belleza. A pie, desde esta playa fluvial se puede pasar a los parajes protegidos. No en vano, al igual que El Puerto de Santa María tiene su acceso a Los Toruños por Valdelagrana, Puerto Real tiene ese espacio de río y parque.
Uno de los puntos donde se podía disfrutar de un café, una cena o incluso una copa era el chiringuito Katanga. Este espacio reunía a familias y grupos de amigos en el río San Pedro. Al paso de las barquillas, el sol se pone en dirección a Cádiz, donde se ve a apenas unos metros el puente de la Pepa.
Y sin embargo el establecimiento no ha superado el golpe de la crisis del covid. La Policía Local de Puerto Real alertaba hace apenas un año de una reunión de personas de un centenar entre el interior, el exterior y el entorno del local. La empresa señalaba que no se le podía responsabilizar de quien estaba fuera de su establecimiento.
Ahora, en este mayo de 2021, el establecimiento ofrece una imagen penosa, con abandono, cristales rotos al entrar, plásticos y maderas carcomidas, con la terraza apuntalada.
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