En Chiclana, hay un rincón gastronómico que se ha ganado la confianza de los amantes de la buena comida y, sobre todo, de quienes deben tener especial cuidado con los alérgenos. La Florida, asador y freiduría, es ya un referente para quienes buscan platos sabrosos sin renunciar a la seguridad alimentaria. Su especialidad: pollo y pescaíto frito 100% aptos para celíacos, preparados con un estricto control de la contaminación cruzada.
Este establecimiento, ubicado en Calle Sor Ángela de la Cruz número 18, no solo es famoso por sus recetas familiares y su minuciosa gestión de alérgenos, sino también por la variedad de opciones sin gluten que ofrece. Desde el popular pollo asado, disponible en diferentes versiones —al limón, al ajillo, con salsa picante o con salsa de ajos— hasta paellas, tortillas sin gluten ni lactosa y una amplia selección de postres caseros.
La Florida ha querido dar protagonismo también a las ensaladillas, otro de sus puntos fuertes. Ofrecen tres variedades: la ensaladilla rusa, con patatas, zanahorias, atún, mayonesa y pimientos de piquillo; la de patatas alioli, con mayonesa casera elaborada con ajo y perejil; y las tradicionales zanahorias aliñadas, receta chiclanera con el toque especial de la casa.
De las ensaladillas al arroz con leche
La gran ventaja es que estas ensaladillas, al igual que el resto de su menú, son sin gluten y sin lactosa, lo que amplía las posibilidades para que personas con intolerancias alimentarias disfruten sin preocupaciones. No es casualidad que el local se haya ganado fama de especialista en alérgenos: la higiene y la calidad son pilares en su cocina.
Entre sus dulces más demandados están el arroz con leche, pastel de queso, flan de chocolate, natillas, flan de turrón y mousse de limón. Todos se presentan en tarrinas y, lo más importante, todos sin gluten, para que nadie se quede sin disfrutar del final dulce de la comida.