PizzaJoy, una de las pizzerías más conocidas de Chiclana, cambiará de manos este octubre. Ana Laura Palma y Antonia Heredia se harán cargo del negocio con el objetivo de mantener la esencia que ha fidelizado a los clientes y mejorar ciertos servicios. "Queremos que la gente no note el cambio en lo esencial, aunque iremos introduciendo algunas novedades", explican las nuevas propietarias.
Ubicada en la Avenida Diputación, la pizzería lleva siete años consolidando una clientela fiel. Su local permite un acceso sencillo tanto para vecinos como para turistas que se dirigen a la playa. "Es una zona bastante céntrica y accesible; se encuentra fácil aparcamiento y es un punto de paso entre el pueblo y la playa", detallan Palma y Heredia.
Las socias aseguran que no buscan cambios drásticos en el concepto ni en la calidad de los productos. "Ni ingredientes, ni pizza, ni nada, porque entendemos que funciona ya de por s"”, señalan. Su enfoque se centra en reforzar aspectos complementarios para mejorar la experiencia del cliente, especialmente el reparto a domicilio y la publicidad.
Actualmente, el servicio de domicilio solo se realiza a través de aplicaciones externas. "Queremos instaurar un servicio a domicilio propio y acercarnos a todo Chiclana, que no haya límite para poder llegar a la gente", explica Ana Laura Palma. Además, las socias planean aumentar la presencia del negocio en publicidad y redes, con el objetivo de llegar a más hogares.
Según ellas, Pizzajoy se diferencia por la relación calidad-precio de sus pizzas y la posibilidad de que los clientes personalicen sus pedidos. "El cliente es su propio chef, puede elegir tipo de masa, salsas e ingredientes", señalan las nuevas propietarias. Las ofertas 2x1 siguen siendo las más solicitadas y forman parte de la estrategia de fidelización del local.
Ambas socias cuentan con experiencia en hostelería en Chiclana. Antonia Heredia es licenciada en Dirección y Administración de Empresas, mientras que Ana Laura Palma tiene formación en Publicidad, Marketing y Relaciones Públicas. "Nos gustan los desafíos y trabajaremos con un equipo con el que ya hemos colaborado, formando un buen tándem", subrayan.
Un paso al lado... y no porque el negocio vaya mal
El propietario actual, José Ángel Rodríguez, fundó Pizzajoy en 2018 tras transformar la anterior pizzería que estaba en el local. Explica que el cambio de dueños se debe a motivos personales y empresariales: "Tenemos otros negocios y estamos en otro momento de nuestra vida. Me quedo mucho más tranquilo e incluso más alegre de que lo tomen ellas, porque sé que le van a dar cariño al negocio".
A lo largo de su historia, Pizzajoy ha mantenido la lealtad de los clientes incluso durante la pandemia. "Cuando abrimos, la gente estaba deseosa, y en pandemia sonaba el teléfono sin parar", recuerda José Ángel. La clientela sigue siendo fiel desde 2018, consolidando un público que valora la relación calidad-precio y la posibilidad de personalizar sus pizzas.
El cambio de dueños se espera que se haga efectivo durante octubre. Las nuevas propietarias aseguran que continuarán la línea de trabajo actual, manteniendo la esencia de Pizzajoy y reforzando los servicios complementarios.
