El Ayuntamiento de Chiclana ha hecho balance de la primera temporada de la Zona Naranja, el sistema de estacionamiento regulado en el litoral chiclanero implantado entre el 10 de junio y el 30 de septiembre. Durante ese periodo, se recaudaron 1.410.678,12 euros, según los datos ofrecidos por el alcalde José María Román, acompañado por el delegado de Movilidad, José Vera, y la delegada de Hacienda, Isabel Butrón.
Además, se han tramitado 2.033 avisos de denuncia al Servicio de Recaudación de la Diputación por impago de la tarifa, lo que supondrá unos ingresos adicionales de más de 100.000 euros. “Teníamos que hacer balance de la Zona Naranja, una vez finalizó el periodo el pasado 30 de septiembre”, señaló Román, quien destacó que “el presupuesto era de 1,5 millones de euros, por lo que prácticamente se ha cubierto lo previsto inicialmente”.
Un “éxito” para la movilidad y el mantenimiento del litoral
“El balance es muy positivo. La Zona Naranja ha sido un éxito, ya que hemos recaudado de los visitantes que vienen a disfrutar de la playa para sufragar los gastos de su mantenimiento”, afirmó el alcalde. Según explicó, el sistema ha permitido disponer de más plazas de aparcamiento y una movilidad más fluida en la zona costera.
Román añadió que la medida ha cambiado los hábitos de los vecinos: “Con la puesta en marcha de la Zona Naranja, muchos propietarios que antes aparcaban en la calle han optado por estacionar sus vehículos en los garajes o dentro de sus parcelas”. También recordó la creación de aparcamientos alternativos como los de Loma del Puerco y Novo Sancti Petri, además de calles exentas del sistema regulado.
Mejoras previstas y aprendizaje para el próximo verano
El regidor explicó que, una vez reunida toda la información de la empresa concesionaria Aussa y de los vecinos de las distintas zonas del litoral, el Consistorio analizará los datos para introducir mejoras de cara al próximo verano. “Ha sido un éxito hasta tal punto que distintos ayuntamientos nos han preguntado por su funcionamiento, aunque eso no quita que haya algunos asuntos a mejorar”, señaló.
El alcalde subrayó además que “la Zona Naranja ha sido abonada por visitantes que no son de Chiclana y que contribuyen a financiar algo tan importante como el mantenimiento de las playas de La Barrosa y Sancti Petri”. En su opinión, si ese gasto no lo asumieran los turistas, “lo tendríamos que abonar los chiclaneros con nuestros impuestos”.
Román destacó también que los ingresos obtenidos “contribuyen a financiar programas de empleo en temporada baja, afianzando el turismo durante los meses de otoño e invierno con el objetivo de alargarlo al máximo”.
Por su parte, el delegado de Movilidad, José Vera, avanzó que la próxima semana se celebrará una reunión con la empresa concesionaria para revisar los resultados y ajustar detalles de cara al verano de 2026. Entre las mejoras a estudiar, citó el uso de la aplicación móvil (APP) como herramienta de pago y gestión del estacionamiento.
“Vamos a planificar con tiempo esas acciones con el fin de tener un mejor servicio en los siguientes años”, concluyó Vera.