Cerca de cuatro días han tardado los equipos de rescate en sacar del embalse de Guadarranque, en Castellar de la Frontera, el helicóptero accidentado el pasado viernes. Lo hicieron este lunes, a las 22.00 horas, según ha dado a conocer la subdelegada del Gobierno en Cádiz, Blanca Flores, en un mensaje remitido a los medios de comunicación.
El equipo especializado de la empresa RTS Rotorsun, propietaria del helicóptero, pudo culminar los trabajos después de haber reflotado la aeronave el pasado domingo y haberla estabilizado para terminar de sacarla del embalse durante la tarde del lunes.
De esta manera, ha explicado Blanca Flores, “concluye la operativa”, que “se ha desarrollado todo con medidas preventivas de protección ambiental”.
La subdelegada ha agradecido la labor del equipo técnico de la empresa, así como de los responsables de la Subdelegación del Gobierno, del Parque Natural Los Alcornocales, de los mandos y del GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) de la Guardia Civil y del alcalde, Adrián Vaca, y el equipo de gobierno de Castellar, todos ellos “fundamentales en la toma de decisiones” sobre este suceso.
La salud pública, "asegurada"
El accidente tuvo lugar el viernes, cuando el helicóptero realizaba una extracción de agua del embalse, se precipitó al interior del mismo. Es una aeronave contratada por el Ministerio para la Transición Ecológica que realizaba trabajos de mantenimiento y entrenamiento. El accidente, que afortunadamente no dejó víctimas, ha obligado a la Junta de Andalucía a tomar medidas inmediatas para asegurar el abastecimiento de agua a la comarca.
La Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural se apresuró a confirmar la salud pública está “plenamente asegurada” y que el suministro no corría peligro. Desde el primer momento, la Junta ordenó el cierre inmediato del embalse de Guadarranque y la suspensión de la extracción de agua, al tiempo que activó un dispositivo para controlar la calidad.
