Los restos óseos de 68 personas víctimas de la represión franquista han sido inhumados este 30 de abril en el recién inaugurado Parque de la Memoria de Benamahoma, un espacio que dignifica el lugar donde fueron ejecutadas durante el verano de 1936. El enclave, que albergó 19 fosas comunes, se transforma así en un lugar de recuerdo, reflexión y justicia histórica gracias al impulso del Servicio de Memoria Histórica y Democrática de la Diputación de Cádiz.
Las campañas de exhumación, desarrolladas entre 2017 y 2019, permitieron recuperar los cuerpos de personas fusiladas tras el golpe de Estado, muchas de ellas detenidas en Grazalema, Prado del Rey, Villamartín, El Bosque o Benamahoma. Las ejecuciones fueron perpetradas por falangistas de la centuria Los Leones de Rota, bajo el mando de Fernando Zamacola, y con la participación de la Guardia Civil.
Un acto para la memoria y la dignidad
Durante la inauguración del parque se celebró un acto de homenaje con participación de representantes institucionales, asociaciones memorialistas y familiares de las víctimas. Intervinieron el alcalde de Grazalema, Carlos García Ramírez; la delegada de Alcaldía en Benamahoma, Mamen Fernández; la vicepresidenta de la Mancomunidad de la Sierra, Ana Medina; y miembros de AFACO, como Eli González Calvillo. También tomó la palabra David Doña, del Servicio de Memoria Histórica y Democrática de Diputación.
Un momento especialmente emotivo fue la lectura de un texto por parte del exalcalde de El Bosque, Antonio Ramírez, dedicado a los vecinos de su localidad, como Fernando Carretero Moscoso, cuyo testimonio fue escuchado con emoción por su hija María Carretero Jiménez, de 93 años, y por Ana Zapata Casanova, de 90, vecina de Villamartín, cuyos padres fueron ejecutados cuando ella era una niña.
La ceremonia concluyó con un epílogo musical interpretado por Sara Díaz y Nur Ramírez.
Identificación pendiente y trabajo científico
Los restos han sido depositados en nichos individualizados, a la espera de que los análisis de ADN, encargados a la Universidad de Granada, puedan confirmar identidades. El proceso ha sido coordinado por el arqueólogo Jesús Román, junto a un equipo científico integrado por Antonio Domínguez, Juan Manuel Guijo, Raquel Lacalle y Antonio Ortega.
Román tuvo palabras de homenaje para Carlos Perales, técnico del Servicio de Memoria de Diputación fallecido en 2018, cuyo impulso fue clave en la búsqueda de represaliados.
Entre las víctimas identificadas hay al menos tres mujeres, y la mayoría tenía entre 30 y 45 años. También se han recuperado restos de jóvenes de entre 20 y 25 años y un adolescente de 16.
Un parque para la memoria colectiva
La Diputación de Cádiz, que ha financiado las excavaciones y el nuevo espacio con 37.500 euros, ha sido clave para transformar el antiguo cementerio en un parque con paneles explicativos, elementos paisajísticos y un conjunto escultórico que recuerda a las víctimas. El proyecto ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Grazalema, la Mancomunidad de la Sierra de Cádiz y la FEMP.
El vicepresidente de la Diputación y responsable del área de Memoria Democrática, Javier Vidal, destacó la importancia de "asentar estos lugares de memoria y fomentar su valor pedagógico", especialmente para las nuevas generaciones.o
Hace casi 90 años, Benamahoma —conocida entonces como Las Huertas— fue un lugar de ejecuciones. Los detenidos eran fusilados entre la plaza de toros y la Iglesia de San Antonio, y sus cuerpos, arrojados a fosas comunes en el cementerio. Aunque con el tiempo se trasladaron los enterramientos oficiales al nuevo cementerio, las fosas permanecieron ocultas bajo tierra.
